Pendiente aún por obtener su cédula profesional en psicología y con una discapacidad que ha sido progresiva y degenerativa, Matilde afronta un proceso de adaptación a sus mismas condiciones físicas
Foto: CONADE Pendiente aún por obtener su cédula profesional en psicología y con una discapacidad que ha sido progresiva y degenerativa, Matilde afronta un proceso de adaptación a sus mismas condiciones físicas.  

La multimedallista parapanamericana Matilde Estefania Alcázar Figueroa tiene el objetivo claro: alcanzar su tercera justa paralímpica, ahora en territorio francés para el próximo verano, como parte de la delegación mexicana, pero para ello primero tiene que igualar la quinta mejor marca a nivel mundial, que le dará su clasificación y en la cual debe bajar, por lo menos, ocho segundos.

Motivada y decidida a entregarlo todo en estos meses finales de preparación, tras finalizar el 2023 como la sexta mejor clasificada en el mundo de la para natación, con un tiempo oficial de 5:35’57 en su prueba estelar de 400 metros libres categoría S11, Alcázar convive con la idea de llevar al máximo sus capacidades para conseguir su satisfacción deportiva, pero se encuentra a la espera de que le avisen cuáles son las pruebas en las que participará antes de Juegos Olímpicos.

Te puede interesar: Muere Héctor “Capi” Sanabria, emblema de los PUMAS de la UNAM


“Más que alguna presión extra, soy una persona que se exige mucho. En su momento creo que es bueno, pero algunas veces ya en competencia lo hago tanto que pierdo esa sensación de estar ahí y disfrutarlo”, señaló la vigente campeona continental a 24 Horas.

Aunque destaca que las condiciones actuales para el deporte adaptado tienen puntos de mejora en aspectos como la preparación o el tener mayor actividad en competencia, la nadadora se pone metas ambiciosas para este año, al querer competir también en la prueba de 200 metros combinado, tras imponer una nueva marca continental en Santiago 2023, con tiempos generales de 3:02.27

Te puede interesar: Así se despidió Rodolfo Pizarro de su tía asesinada



Sobre la advertencia que ha realizado Liliana Suárez, presidente del Comité Paralímpico Mexicano, que ha señalado al recambio generacional como un punto a considerar en la posible cosecha de metales paralímpicos, Matilde Alcaraz considera que dicha tarea recae en cada competidor y no tanto en la experiencia que se tenga.

“Aún nos falta demasiado pero en mi caso yo me siento con la obligación de orientar a los demás con los muchos o pocos conocimientos que tenga. Se tiene que valorar el impacto que tendrá, pero creo que recae en nosotros como atletas. Aún así creo que no habrá una afectación como tal para la delegación”, destacó.

Te puede interesar: Cómo Se Prepara México Para Los Juegos Olímpicos 2024



Pendiente aún por obtener su cédula profesional en psicología y con una discapacidad que ha sido progresiva y degenerativa, Matilde afronta un proceso de adaptación a sus mismas condiciones físicas, que no le impiden continuar esa carrera deportiva que ya la ha llevado a títulos parapanamericanos y en campeonatos mundiales. “Quiero ser tan independiente y crecer pero disfrutar del camino y de las caídas para también aprender de ellas”.

“Sé que habrá días en los que me levante pensando por qué y para qué sigo haciendo esto, pero a mi me motiva el deporte al igual que las personas que me rodean y justamente esas preguntas son las que me hacen levantarme diario porque las medallas se hacen en los entrenamientos”, afirmó la nadadora de 28 años.