Carlos Franco Cantón, un inquieto joven yucateco especialista en natación de fondo, entrena en Mérida para recorrer un kilómetro en las gélidas aguas del continente antártico a fines de febrero próximo, sin buscar otra cosa que hacerlo por la Tierra.

Para realizar su rutina en las bajas temperaturas, mismas que experimentará en el lugar más helado del planeta, se vale de sesiones “en las rocas” dice a manera de broma.

“En una piscina echo marquetas de hielo en el agua y espero unos minutos a que se quede helado para meterme y comenzar a nadar”, explicó.

Como socio de la escuela Antares implementó una turbina para generar corriente de agua en una tina, a la que llamó la alberca interminable, y a temperaturas de cinco a 10 grados Celsius, practica sólo por 20 minutos tres días a la semana.

“Tengo una tina con jacuzzi en casa a la que le pongo marquetas, donde me remojo estático a una temperatura de 3.5 grados entre 30 a 45 minutos máximo, que es lo que aguanta mi cuerpo y para no correr riesgo de hipotermia”, añadió. 

Además, su entrenamiento requiere de ejercicios y Carlos no acude al parque cercano a su casa, se mete a la congeladora de una empresa comercial que lo patrocina, donde diariamente camina y corre en los pasillos, hace sus flexiones y sus sesiones de fuerza. 

“La tina y el nado lo voy combinando: tres días tina y tres días los nados contracorriente”, abundó el atleta.  

VA POR RÉCORD GUINNESS

Franco Cantón apuntó que utiliza un sistema que va del calor al frío o al revés para llegar lo mejor preparado a la Antártica. “Que yo sepa, habrá quienes ya hayan realizado esa proeza, pero nunca algún habitante de un clima tropical o con calor todo el año”.

Aunque pudo irse a Noruega, Dinamarca o Canadá su intención es demostrar que una persona que vive en un lugar cálido, puede también superar el reto.

“Estamos tratando de ver si podemos conseguir un récord Guinness por esa vía(…) La otra es que lo estoy haciendo para crear conciencia ambiental de que el cambio climático es evidente y que estamos destrozando nuestro planeta”.