Para el cierre del 2023 resurgirán las presiones inflacionarias en México y en todo el mundo, dijo la firma aseguradora de crédito Coface.
Entre estos factores de preocupación están la incertidumbre geopolítica, cambio climático, las restricciones a las exportaciones y la eficiencia de los sistemas agroindustriales de los países, de acuerdo con el Barómetro de Riesgo país y sectorial del tercer trimestre del 2023.
“La lucha contra la inflación aún no se ha ganado ni siquiera ha entrado en su doloroso último tramo, porque excluyendo la energía, la inflación sigue muy por encima del nivel objetivo fijado por los bancos centrales” de los países.
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La aseguradora de crédito explicó que están también las inquietudes que se generan por las guerras, la dificultad para que vuelvan a operar con normalidad las cadenas de producción y el balance entre la oferta y demanda.
Ello se dará a pesar de que a lo largo del año cedieron “mecánicamente” los factores que impulsaron el alza de precios, como lo fue la baja de cotizaciones de los energéticos y de los commodities.
Coface calificó con un riesgo de medio a alto el tema del peligro climatológico, en especial el fenómeno de El Niño que genera sequías y afecta a todos los países.
Eso significa que, aunque en el 2023 la cosecha de cereal creció 1% a nivel global, de acuerdo con las proyecciones de la FAO, los riesgos climatológicos en la región Indo-Pacífico, sobre todo en India, que el mayor productor mundial de arroz, azúcar y trigo.
La baja de precios de los bienes industriales está vinculado a un reequilibrio de la oferta y a que la demanda se redirigió al consumo de servicios y el que aún siguen los problemas en las cadenas de suministro.
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La firma de seguro de crédito dijo que la inflación genera un riesgo social, porque la población mundial siente que se erosionó su nivel de vida porque el alza de precios no les permite que mantengan sus gastos como antes, lo que les genera frustración y puede llevar a disturbios sociales.
Aunque, para Coface el panorama económico en general es mejor para la economía mundial con respecto a lo visto el año pasado, no hay que respaldar esta lectura tan optimista.
Existen factores que preocupan, como el riesgo político, al elevarse el indicador a niveles altos, ya que se advierte que puede subir el populismo, terrorismo, los conflictos políticos, el malestar social, entre otras presiones que pueden generar tensión.
LEO