En Argentina Javier Milei, candidato del partido político La Libertad Avanza, tiene aspecto de un cantante de rock trasnochado. Sus patillas casi llegan a las comisuras de los labios; esos que abrió el día que ganó la primera vuelta hace unas semanas en Argentina, como si se tratara de un león herido. El verbo y la euforia le ganaron al sosiego.

Y es que Javier Milei tiene grandes posibilidades de ser el próximo Presidente en Argentina cuando se celebre la segunda vuelta a finales de octubre.

Ya con el treinta por ciento de votos en la primera vuelta, por encima de Juntos Por el Cambio de Macri con un veintiocho por ciento, y de la coalición oficialista -peronista – kirchnerista Unión por la Patria con un veintisiete por ciento.

Contra todo pronóstico venció cuando se presentaba, según las encuestas, como la tercera fuerza política. ¿Qué ocurrió entonces?

Argentina está al borde de una crisis de marca mayor con la posibilidad nada desdeñable de un estallido social. La inflación está desbordada –supera el ciento trece por ciento anual–, la violencia en las calles es cada vez mayor y los asaltos a los comercios están a la orden del día. Todo ello unido a una crispación política que vive el país hace que la situación de Argentina esté en un momento sumamente vulnerable.

Entonces llegó Milei con las clásicas frases populistas de la extrema derecha. -no vine a guiar corderos, vine a despertar leones– son algunas de las lujosas jaculatorias del personaje.

A Argentina le ocurre lo que les ocurre a muchos países del mundo. Ante la falta de respuestas de los políticos de toda la vida emergen figuras populistas que le otorgan a los oídos de los ciudadanos lo que los ciudadanos quieren escuchar. Por eso los Trump o los Bolsonaro de la extrema derecha, o los Díaz-Canel, Ortegas o Maduros de turno de la extrema izquierda.

Ante una situación francamente tan deteriorada, Argentina pudiera vivir momentos de cambio hacia una derecha más cerrada en sí misma. No es lo más deseable, pero es lo que han cosechado los políticos.

 

    @pelaez_alberto