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El gobierno español pidió este viernes al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) que suspenda a Luis Rubiales, tras abrirle un expediente sancionador por el beso forzado a la jugadora Jenni Hermoso, mientras el dirigente federativo aseguró que seguirá defendiéndose “para demostrar la verdad”.

“El Consejo Superior de Deportes (CSD) va a instar al tribunal que proceda a suspender temporalmente de sus funciones a Luis Rubiales hasta que se resuelva definitivamente el expediente que le afecta”, dijo el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, de cuyo departamento depende el CSD.

El ejecutivo pedirá al TAD que inhabilite temporalmente al presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), ya suspendido por la FIFA, ante la imposibilidad de poder hacerlo el CSD por la calificación utilizada por el Tribunal, que llevaba deliberando sobre el caso desde el pasado lunes.

El TAD ha abierto un expediente por falta grave, pero, según la legislación vigente, el CSD necesitaba que las acciones investigadas fueran calificadas de falta muy grave para que este organismo tuviera poder para suspender a Rubiales.

“De todas maneras en aplicación del artículo 102 de la ley del deporte, el Consejo Superior de Deportes va a instar al tribunal que proceda a suspender temporalmente de sus funciones a Luis Rubiales hasta que se resuelva definitivamente el expediente que le afecta”, explicó Iceta.

“Decepcionados”

De esta manera, ante la imposibilidad de que el CSD pueda suspender a Rubiales, pedirá que sea el propio TAD el que lo haga.

El CSD había presentado el viernes pasado una denuncia ante el TAD por dos “infracciones muy graves” por un posible “abuso de autoridad” y “actos que atentan a la dignidad o decoro deportivos”.

Para Iceta, esto no ha cambiado: “las actuaciones del presidente de la Real Federación Española de Fútbol merecen el calificativo de muy graves por abuso de autoridad y perjuicio de la imagen de nuestro fútbol”.

“De alguna manera estamos decepcionados por la decisión” del TAD, admitió el ministro español, que insistió en trabajar para evitar que la imagen dada por Rubiales pueda afectar a la candidatura al Mundial-2030.

“Estamos ya en contacto con la FIFA para evitar que el daño que se ha causado a nuestra imagen a nivel internacional tenga consecuencias negativas en ningún tipo de competición”, explicó Iceta.

Nada más conocerse la decisión del TAD, Rubiales aseguró en un comunicado en el diario El Mundo que “voy a seguir defendiéndome para demostrar la verdad”, considerándose víctima de “un linchamiento político y mediático sin precedentes”.

Rubiales no sólo tiene abierto dos expedientes deportivos, sino que en la vía penal, la fiscalía de la Audiencia Nacional, principal instancia penal española, abrió diligencias por un “presunto delito de agresión sexual”.

La Fiscalía afirma basarse en las “manifestaciones públicas” de la jugadora, pero contactará con ella para ofrecerle la posibilidad de formalizar una denuncia, un paso clave para que esta vía pueda avanzar.

De la Fuente pide perdón

Hermoso había afirmado en un comunicado la pasada semana haberse sentido “vulnerable y víctima de una agresión” por el beso de Rubiales durante la entrega de medallas tras la final del Mundial en el estadio de Sídney.

El mandatario sorprendió posteriormente al negarse a dimitir durante una asamblea hace una semana, en la que muchos daban por hecho que lo haría y en la que los aplausos del auditorio ante su discurso de resistencia causaron indignación.

Entre los que aplaudieron se encontraban los seleccionadores masculino, Luis de la Fuente, y femenino, Jorge Vilda, que posteriormente criticaron la actitud de Rubiales.

“He recibido duras críticas (por aplaudir el discurso) que son totalmente merecidas, lo lamento, lo comprendo y pido perdón por ello”, señaló este viernes De la Fuente, al dar lista para los partidos clasificatorios para la Eurocopa de 2024 contra Georgia y Chipre de la próxima semana.

El seleccionador español afirmó que acudió a la asamblea del viernes “convencido de que asistíamos a un acto protocolario de despedida a un presidente, pero se transformó en algo totalmente diferente para lo que no estaba preparado”, insistiendo en que “fue una situación que me superó”.

Ante las peticiones de dimisión, aseguró que “no tengo que dimitir, tengo que pedir perdón, cometí un error, un error humano”.

De la Fuente ha sido ratificado en su puesto por el presidente interino de la RFEF, Pedro Rocha, apoyado por los presidentes de federaciones territoriales, mientras que el futuro de Vilda se perfila mucho más incierto.

Según algunos medios, Vilda podría ser destituido la próxima semana.

LDAV