Luego de 10 días de la denuncia de los productores, Apatzingán sigue en paro ante las amenazas del crimen organizado
Foto: Quadratín Aproximadamente 40 mil familias de Apatzingán viven de la producción del cítrico.  

Limoneros de seis municipios de Tierra Caliente, en Michoacán, operan con normalidad, según reportes de los propios productores.

En un comunicado, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) informó que de los siete ayuntamientos que se dedican a producir el cítrico, únicamente en Apatzingán se dejó de trabajar, lo que representa poco más de 22% de la producción total del estado.

En tanto, Buenavista, Múgica, Parácuaro, Tepalcatepec, Aguililla y La Huacana continúan con sus labores, lo que representa una producción anual de 663 mil 153 toneladas.

Tan solo en Buenavista, considerado el municipio con mayor producción de limón mexicano, se generan 286 mil 260 toneladas anuales.

De esta forma, dijo el titular de la Sader, Cuauhtémoc Ramírez, se garantiza la distribución y abasto del producto.

Añadió que por parte del Gobierno estatal y, de forma conjunta con la federación, se respalda al sector limonero de Michoacán con la entrega de 20 mil plantas a productores de limón mexicano, variedad Colimex.

El Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA) aclaró que la demanda está cubierta con otras variedades de limón sin semilla o limón verde agrio que vienen de Veracruz y Colima, por lo que de haber freno en Michoacán no habrá desabasto, más bien explicó son acaparadores y especuladores los que hacen que se disparen los precios.

Informó que en diversos puntos de la capital del país el limón se ubica en 80 pesos por kilo por el “presunto desabasto”.

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BEDOLLA JUSTIFICA EXTORSIONES

Apenas este martes, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla argumentó que el tema de la extorsión a los limoneros de la Tierra Caliente se remonta a dos décadas, cuando menos, y que ya es algo normalizado.

Aunque dijo que no hay que resignarse a pagar la cuota a los grupos delictivos.

De acuerdo a los reportes, unas 40 mil familias de la región de Apatzingán, viven de la actividad limonera, pero no pueden trabajar porque se encuentran bajo amenaza del crimen organizado.