A las 13:30 horas, el juez Ariel Montoya Romero, iniciará la lectura de la individualización de la pena en contra de Diego Urik Mañón Melgoza; la Fiscalía solicitó la pena de 50 años en prisión y pago de un millón 981 mil pesos.
El cálculo de la pena solicitada por la representación social, añadió, fue por la mecánica de hechos, violencia y también el impacto proporcional de su muerte hacia la familia.
Por instrucciones del juzgador, el sentenciado de feminicidio acudirá personalmente a escuchar el número de años que pasará privado de la libertad por la muerte de la profesora Jessica González Villaseñor.
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La defensa del acusado, solicitó al juzgador la mínima, de 20 años, argumentando que es primo delincuente, estudiante y sin antecedentes penales, además de que el perfil criminológico efectuado en su ingreso al penal, advierte que no es un riesgo para la sociedad y que tuvo que vivir aislado, porque corría riesgo en el penal.