"Estaríamos abriendo una puerta a la vanguardia de la minería urbana"
Foto: Sedema CDMX | "Estaríamos abriendo una puerta a la vanguardia de la minería urbana"  

Ante el amplio consumo de pilas en la Ciudad de México, la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) local colocará contenedores en 50 Puntos de Innovación, Libertad, Arte, Educación y Saberes (Pilares).

La colocación de estos contenedores se realizará como parte de una alianza con una empresa privada, de manera que las pilas desechadas tengan un reciclaje y aprovechamiento adecuados, señaló Marina Robles, titular de la Sedema capitalina.

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“Digamos que ésta es la oportunidad que da la alianza entre una empresa y el gobierno para poner a disposición de la gente una forma de manejar un tipo de residuo que no necesariamente sabemos qué hacer en estos casos y que estos materiales son altamente contaminantes”, refirió al tiempo que agregó que anualmente se consumen alrededor de mil 270 toneladas de pilas en la Ciudad de México, por lo que los contenedores colocados ya no son suficientes para almacenarlas.

Destacó que uno de los retos a los que se enfrenta la sociedad actualmente es a producir bienes particulares como microchips utilizados en automóviles, celulares o computadoras, con materiales que cada vez son más escasos y por lo tanto costosos.

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Robles señaló que la meta final es colocar contenedores en los 300 Pilares de la Ciudad, por lo que de esta manera se estará contribuyendo a la economía circular lo que generará una gran oportunidad de avanzar armoniosamente en el esquema productivo y de consumo hacia la sustentabilidad.

“Estaríamos abriendo una puerta a la vanguardia de la minería urbana. La minería urbana es una de las grandes oportunidades que tenemos en el mundo dentro del esquema de la economía circular para disminuir la presión que la minería ejerce en los ecosistemas vírgenes y además aprovechar algo que ya tenemos en circulación y que está en los celulares, en las computadoras, en los autos, en muchísimos de los productos que consumimos y que creemos que una vez que dejan de ser útiles para nosotros se convierten en desperdicio”, expresó.

AR