Existe la creencia entre los inversionistas de que el rendimiento de enero en los mercados se refleja muy probablemente en el cierre anual, es decir, un rendimiento positivo en enero, llevaría a un rendimiento positivo a cierre de año o viceversa un rendimiento negativo en enero, llevaría a un rendimiento negativo al finalizar el año.

Realizamos un análisis del desempeño de las bolsas de EE.UU. y México en los últimos 7 años (2016 – 2022) para evaluar estos escenarios.

Para el caso de mercados en Estados Unidos, considerando los tres mercados más importantes (Dow Jones, S&P500 y Nasdaq) en el 62% de las veces coincide que el rendimiento de enero refleja el comportamiento del año en términos de ser positivos o negativos.  Si en enero baja el mercado, el cierre anual será negativo o viceversa.

De manera individual, en el Dow Jones y en el S&P500 coincide esta premisa en el 57% de los casos. Sin embargo, para el Nasdaq, el indicador aumenta hasta 71%, volviéndose más sensible todavía.

Además, analizamos en rendimiento de enero vs rendimiento anual con algunos indicadores como la inflación anual y el PIB, teniendo a la inflación como una variable más sensible vs el PIB.  Cuando la inflación anual es superior a 4.5%, el resultado del rendimiento del mes de enero se vuelve más relevante, pues en todos los casos el desempeño de enero coincide con el cierre del año.

Por ello, si la expectativa de inflación anual en EE.UU. es superior al 4.5% para 2023, el resultado del rendimiento de enero estadísticamente se vuelve muy importante.

Para el caso del mercado accionario en México, el rendimiento de enero coincide con el mismo signo de rendimiento de cierre de año en el 57% de los casos, pero si la inflación es superior a 4.5% su efectividad es del 75%.

En conclusión, enero y una expectativa de inflación arriba de 4.5% anual se vuelven sensibles para el rendimiento anual de las bolsas.

 

Cae confianza empresarial

El Indicador Global de Opinión Empresarial de Confianza fue de 45 puntos, el más bajo desde febrero de 2021, cuando cayó a 42.85 unidades, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

Por cada uno de los cuatro sectores que lo integran, en diciembre de 2022 y con cifras desestacionalizadas, el Indicador de Confianza Empresarial (ICE) del sector manufacturero retrocedió 0.2 puntos respecto a noviembre; el de servicios privados no financieros, 2.3 puntos; el de Comercio, 0.8 puntos y el de Construcción, 0.5 puntos.

Asimismo, en su comparación anual de diciembre del 2022, el ICE de servicios privados no financieros disminuyó 15 puntos; el de Comercio, 10.7 puntos; el de Construcción, 5.6 puntos y el de Industrias manufacturas, 3.3 puntos.

 

Compromiso portuario

Vaya que Hutchison Ports se mantiene a la vanguardia, prueba de ello es que poco antes de finalizar el año, su terminal en Lázaro Cárdenas operó 252 contenedores y 248 Flat Racks con mil automóviles, provenientes de Taicang, China, luego de recibir al navío Zhong Yuan Hai Yun Chuang Xin de Cosco. Contenedores y Flat Racks no son usuales para estos traslados, sin embargo, han sido la solución a la escasez de Car Carriers o RoRo’s, buques diseñados para transportar autos, que trajo consigo la pandemia de Covid-19.

Así, la empresa que dirige en México, Jorge Magno Lecona, se posiciona en línea con las necesidades actuales y muestra capacidades para atenderlas; pero el compromiso de la compañía no para ahí, se ha dado a conocer que desde tres meses atrás se iniciaron encuentros con miembros de la línea Cosco Carrier y diversos operadores logísticos para coordinarse y solventar óptimamente el reto que encara la industria automotriz en la materia.

 

   @1ahuerta