Adrian Trejo

El Gobierno del cambio está pasando las de Caín para justificar el informe sobre la participación de miembros del Ejército Mexicano en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.

Desde que ocurrieron los lamentables hechos, los padres de los desaparecidos señalaron la participación de militares, pero lo más que lograron fue que les permitieran entrar a la sede del 27 Batallón de Infantería, con sede en Iguala, para que vieran que ahí no había detenidos.

La publicación de las partes “testadas’’ o rayadas del informe que presentó el subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación confirmó que, al menos en esa versión, sí hubo colusión entre militares, policías locales y grupos de la delincuencia organizada.

Así que la consigna “Fue el Estado’’ pasó a ser “Fue el Ejército’’, como se vio el lunes pasado durante la marcha que conmemoró el octavo aniversario de los hechos.

Ayer, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, hizo malabares para tratar de minimizar esa participación que consta en documentos oficiales redactados por funcionarios de este Gobierno.

“Pues creo que son cuatro que ya están detenidos’’, dijo, y luego recurrió al dicho aquel de que “una golondrina no hace verano’’.

“Es como si un senador atropellara y matara a una persona, no van a decir que fue el Senado, fue un senador que deberá hacerse responsable’’, afirmó.

Pues sí.

Bajo esa lógica, no se puede decir que el PRI es corrupto, sino que “algunos priistas’’ lo son; o que la Selección Mexicana de futbol es un desastre, sino que “uno o dos jugadores’’ no se adaptan al sistema.

Lo cierto es que la revelación de las partes tachadas en el informe comprometió la imagen de las Fuerzas Armadas en un momento en el que el Senado discute si aprueba o no una extensión constitucional para que sigan realizando tareas de policías.

Ya se escucharon las voces de los padres de algunos normalistas desaparecidos acusando al Ejército, las del Presidente y su secretario de Gobernación defendiéndolo, pero no se ha escuchado la voz del general secretario de la Defensa, Luis Cresencio Sandoval, fijando una posición oficial sobre estos hechos.

Por lo pronto, para el Gobierno, sí fue el Ejército, pero nomás tantito.

****
Como si cambiar de nombre cambiara el propósito, Adán Augusto López informó que “ya no será consulta ciudadana’’ sino “ejercicio participativo’’, la consulta populachera con la que el Gobierno pretende legitimar sus decisiones respecto a las Fuerzas Armadas.

El ejercicio, que le costará algunos millones de pesos al Gobierno, se hará por vía electrónica y podrán participar los mexicanos con CURP y una identificación oficial.

Algunos creen que se trata de un experimento del Gobierno para conocer su capacidad de realizar una elección, pero se necesitan más recursos y más tecnología para que ello fuera cierto.

Se trata de un experimento, con el que el Gobierno pretende legitimar decisiones tomadas.

¿Por qué no lo hizo antes de proponer anexar a la Secretaría de la Defensa Nacional a la Guardia Nacional? ¿O por qué no lo hizo antes de respaldar la iniciativa del PRI para prorrogar la presencia militar en las calles?

Tiempo y dinero echado a la basura.

****
La oposición capitalina, tan necesitada de consolidar lo hecho en junio del 2021 para aspirar a ganar la jefatura de Gobierno de la CDMX, sale con un video -el papá de Mauricio Tabe, Daniel Tabe, amenazando con un cuchillo a un verificador- que le dará material a Morena para tenerlos en el comal varios días.

¿Así cómo?

LEG