Después de seis meses de invasión rusa en Ucrania parece que se empieza a vislumbrar un ganador. A pesar de tener a una parte muy importante de la sociedad en contra, lo que no nos imaginábamos es que Vladimiro Putin podría hacer temblar al mundo y no sólo con sus bombas nucleares. No. En estos momentos una parte importante de las economías mundiales están en manos de Putin, el autócrata.

Comenzamos a vivir los primeros estertores del verano europeo. Las temperaturas que hemos llegado a tener han sido insultantes. En Madrid sobrepasamos los 44 grados y en Londres 40. Pero como nada es para siempre, los primeros vientos frescos pronto llegarán. Esos mismos vientos terminarán siendo heladores. ¿Cómo serán las próximas navidades y los duros meses de enero y febrero? ¿Cómo podremos combatir el frío?

Vladimiro Putin ya ha asegurado que su gas, el gas ruso, que alimenta a toda Europa, lo va a cortar. Con el petróleo va a hacer lo mismo. Las venas de los gasoductos rusos quedarán vacías. Ante esto, países como Alemania, Noruega o Suecia están trayendo gas de otras latitudes, mientras que la Comisión Europea ha determinado ahorrar toda la energía que se pueda de cara al invierno. Por eso en la mayoría de las ciudades europeas, incluyendo Madrid, se corta la luz de los edificios y muchas luminarias por las noches. Precisamente porque lo peor está por venir. También han comenzado a apagar sus luces ciudades tan emblemáticas como París.

La propia Unión Europea estableció una disposición para que los países del Viejo Continente vayan ahorrando ante un invierno que se prevé duro, más desde que Putin no da su brazo a torcer y quiere poner al resto de los países del Viejo Continente a sus pies.

La energía se convertirá así en un lujo en Europa que lamentablemente no estará al alcance de todos y se creará una pobreza energética en todo el continente.

Pero además la luz, el gas, la gasolina y todos sus derivados serán cada vez más caros – ya lo están siendo – . Pero como eso, todo seguirá subiendo. La ciudadanía tendrá que ahorrar. No se podrá gastar y la economía se enfriará. A partir de ahí habrá masivas destrucciones de puestos de trabajo. Y algo más, la inflación será el gran caballo a batir, al que tendremos que hacerle frente a nivel planetario.

Son momentos muy difíciles y Putin lo sabe. Y sabe que con su paciencia y su perseverancia puede desgastar al enemigo que no sólo es Ucrania sino el resto de los países occidentales.

 

 

  @pelaez_alberto