Durante junio, la inflación general anual se ubicó en 7.99%, un nuevo repunte mensual después de que en mayo pasado habría logrado descender a 7.65%, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Para el sexto mes del año, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró un crecimiento mensual de 0.84%, nivel superior al 0.82% que proyectaba –apenas haces unos días– el consenso de analistas, el cual preveía un nivel de 7.96% para la inflación de junio.
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Al interior de la inflación, en el componente subyacente –que excluye los bienes de alta volatilidad–, se ubicó en 7.49% como resultado del crecimiento mensual de 0.77%. Éste estuvo presionado por el alza de 1.00% en los precios de las mercancías y de 0.50% en los servicios.
En tanto, en el componente no subyacente –que excluye los bienes de alta volatilidad– se posicionó en 9.47%, debido a la expansión mensual de 1.07%. En su interior, se observaron aumentos de 1.76% en los productos agropecuarios, y de 1.76% en los energéticos y las tarifas autorizadas por el gobierno.
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Durante junio, entre los principales bienes cuyas variaciones de precios al alza destacaron por su incidencia sobre la inflación se encuentran, principalmente algunos productos agropecuarios. La papa y otros tubérculos tuvieron una variación mensual de 28.62%, la naranja de 24.85% y el pollo de 3.35%.
No obstante, también se observaron algunos productos procesados y servicios, como la electricidad (2.59%), el pan de dulce (2.29%) y los refrescos envasados (1.66%).