psiquiátricos
Foto: Cuartoscuro / archivo / Andrés Serrano, médico cirujano especialista en psiquiatría, consideró que el país no está listo para dicha transición debido a la falta de infraestructura  

Especialistas y organizaciones civiles difirieron sobre la efectividad de la reforma en materia de salud mental y adicciones, en la que se establece que todo tratamiento e internamiento de esta población usuaria deberá prescribirse previo consentimiento informado, y anuncia la reconversión paulatinas de los psiquiátricos en hospitales generales.

Mientras unos coinciden en que la reforma ayudará a garantizar los derechos humanos de quienes padecen un trastorno mental, otros arguyen que el país no cuenta con la infraestructura suficiente en los hospitales generales y que la atención se recargaría en las familias.

Andrés Serrano, médico cirujano especialista en psiquiatría, consideró que el país no está listo para dicha transición debido a la falta de infraestructura.

Los pacientes psiquiátricos “requieren estar en un área vigilada por enfermería, tener seguridad en las ventanas, en las puertas, evitar objetos con los que se puedan lastimar. Esta área la tendrían que hacer casi casi desde cero, porque no existe” en la mayoría de los hospitales generales.

Expresó que sí existen padecimientos que pueden ser tratados de forma ambulatoria; sin embargo, otros como riesgo suicida o síntomas psicóticos requieren forzosamente de internamiento.

Además, la Organización Comunitaria por la Paz (Ocupa) acusó que la modificación afecta los derechos humanos de los pacientes psiquiátricos debido a que no se considera el entorno de éstos y los puede llevar a la cárcel.

“Hay personas con padecimientos graves psiquiátricos que se enfrentan a contextos familiares complejos, violentos y estigmatizantes, que lejos de verse beneficiadas por la desaparición del modelo asilar, podrían caer en situación de calle, en abandono social e incluso en la cárcel”, manifestó Silvana Carranza, integrante de Ocupa.

Explicó que el Código Penal Federal refiere que en el caso de personas inimputables (aquellas que no pueden reconocer o comprender cabalmente las consecuencias de sus actos), el juzgador puede disponer que el tratamiento se dé en internamiento y al no existir los hospitales especializados “se van a ver obligadas a llevar sus procedimientos en prisión y la atención no será la adecuada”.

En una entrevista con 24 HORAS, Carranza enfatizó que el nuevo modelo de atención asigna la responsabilidad a las familias, con lo que se acentuará la desigualdad de género, pues “representa una sobrecarga al trabajo no remunerado que realizan, principalmente, las mujeres”.

El 16 de mayo pasado se publicó el decreto en esta materia y por el que se establece que el Ejecutivo federal tiene un plazo no mayor a 180 días naturales para emitir las disposiciones reglamentarias necesarias.

MODELO DE PRIMER MUNDO

En tanto, Maricarmen Montenegro, académica de la Facultad de Psicología de la UNAM, expresó que la reforma es “buena” e, incluso, consideró que México va tarde en la implementación de estas medidas, las cuales fueron recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde 2013.

Actualmente, dijo, “la atención psiquiátrica ha hecho que en muy poco tiempo un paciente se pueda volver de consulta externa, y no tenga que estar hospitalizado”, con lo que se impulsaría la inserción social que busca la modificación de la ley.

Esta medida ya se ha implementado en países como España e India con buenos resultados debido a que, afirman especialistas, se impulsa la rehabilitación, la reinserción y el respeto a los derechos humanos de estas personas.

‘Lo único que harán es desproteger’

Rosario, pariente cercana de una persona con esquizofrenia, criticó la decisión de no construir más hospitales psiquiátricos y que los existentes transiten a centros generales de atención.

“Terrible decisión, jamás previeron sus consecuencias, lo único que harán es desproteger a un sector de la población”, consideró.

Manifestó que de no contar con el presupuesto adecuado para la correcta aplicación, la reforma a la Ley General de Salud en materia de salud mental y adicciones se quedará como otros cambios fallidos que ha implementado el Gobierno.

En tanto, Guillermo, a quien le diagnosticaron ansiedad y no fue derivado con un especialista, dijo que la reforma sólo aumentará la problemática que hay en los nosocomios generales, donde el tiempo de espera es alto.

“De por sí no hay lugar y camas en Urgencias, luego uno va con problemas y le mandan cualquier medicamento”, externó.

Comentó a este diario que el hospital general al que acudió ha solicitado incluso que lo canalicen con un neurólogo y otro especialista, pero sin éxito. Por lo que dijo que si de por sí el sistema médico tiene carencias, “si desaparecen los hospitales psiquiátricos no van a poder atender las emergencias”.

LEG