Entre las cosas que ofrece Botín está el que los jóvenes tengan la confianza de acercarse al sector privado sin miedo a que sean rechazados
Foto: Especial Entre las cosas que ofrece Botín está el que los jóvenes tengan la confianza de acercarse al sector privado sin miedo a que sean rechazados  

La misión de la Fundación Botín es contribuir al desarrollo integral de la sociedad, explorando nuevas formas de detectar talento creativo y apostar por él para generar riqueza cultural, social y económica. Para ello, desarrolla programas en los ámbitos del arte y la cultura, la educación, el fortalecimiento institucional, la ciencia y el desarrollo rural. Además, tiene un Observatorio del Agua especializado en el análisis de la gobernanza y la gestión integral de los recursos hídricos.

De esta forma, busca impulsar a los jóvenes profesionistas que quieren adentrarse en el sector público, tanto en España como en América Latina con la misión de fortalecerlo. Pero ello es un proceso complicado en el que la innovación y la inteligencia por parte de los participantes es su principal herramienta.

“La Fundación nació en 1964 en Santander, España; con la misión de apoyar a los profesionistas que tienen afinidad por el sector público, pues creemos que trabajar desde ahí puede proponer situaciones mejores para la sociedad por su fácil acceso y popularidad”, comentó Javier García Cañete, director de programas para Latinoamérica, en entrevista con 24 HORAS.

El directivo, quien se encuentra en México con motivo de una reunión para el proceso de selección de candidatos que se desarrolla actualmente, añadió que la última convocatoria se cerró el 17 de mayo.

“Sin embargo, es un proceso que se desarrolla año con año, en la que recibimos solicitudes para entrar al programa de todos los alumnos en las últimas etapas de su formación profesional y que consideran cuentan con la vocación de ser funcionarios públicos y si resultan seleccionados, iniciando un proceso de ocho semanas de formación presencial en la que conviven con gente de diferentes nacionalidades pero con su misma visión”, añadió.

Actualmente Botín no llega completamente a México pues cada año la Fundación busca ampliar unos centros educativos a su lista.

Sin embargo, “las convocatorias son libres para quienes quieran, incluso si sus universidades no están con nosotros ofrecemos la oportunidad de presentarnos ante sus autoridades económicas y que tomen el gusto por la labor”, agregó.

Botín puede contar con la participación de más de 100 candidatos entre ellos mexicanos quienes han hecho propuestas a lo largo de trece años que es lo que lleva la asociación en México.

NUEVAS PROPUESTAS, MEJORES IDEAS

Este año el recorrido profesional de los participantes inició en la Universidad de Los Andes, recorrerán España y al final Brasil. Pero “eso no es el final”, pues el organismo busca “acompañar en todo el desarrollo formativo que va más allá de concluir el proceso como tal”, abundó García Cañete.

Entre las cosas que ofrece Botín está el que los jóvenes tengan la confianza de acercarse al sector privado sin miedo a que sean rechazados, pues garantiza un apoyo del mismo dado su nombre y herramientas que desarrolla en los participantes.

La situación de México ha sido “bastante favorable”, pues según el directivo de esta fundación española desde que el programa llegó a América Latina, “afortunadamente” se cuenta con el trabajo de 10 profesionistas que “han sabido aprovechar el proyecto, desenvolverse y atraer nuevas propuestas”, que conforman una red sin ideología, es decir que desde cualquier contexto político y social, pueden pedir integrarse al mismo.

Si bien, a pesar de las más de 3 mil solicitudes anuales que recibe Botín, solo se pueden aceptar 36, se invita a que los interesados presenten sus mejores ideas, incluso si el año en curso no fueron seleccionados, pueden competir contra otros países; por ello demanda voltear, analizar y pensar ideas que no dejan de ser innovadoras en cuanto al plano social.

Sin miedo al rechazo

  • La Fundación Botín fue creada en 1964 por Marcelino Botín Sanz de Sautuola y su esposa, Carmen Yllera; apoya al sector público y la innovación en cuanto al ámbito rural, científico y artístico.
  • Botín ha recibido varios premios, incluyendo AFTECA por su apoyo al sector ganadero cántabro
  • Tiene su sede principal en Santander, España, sin embargo el trabajo que realiza la ha llevado a tener un centro en Madrid, así como en algunos países de Latinoamérica.

AR