De acuerdo con el sexto estudio de piratería presentado a finales del año pasado por la Cámara de Comercio Americana (AmCham), la piratería le costó 43 mil millones de pesos en el 2021 a la economía mexicana, entre estos, uno de los sectores que más ha ido en aumento es el comercio informal de cigarrillos ilegales.

La venta de cigarros piratas en el país creció a partir del 2011, desde entonces el consumo de cigarros ilegales creció en 10 años de 2% a 18.8%, alcanzando el 38% de ventas de cigarros piratas en 2021, esto según la investigación de Oxford Economics: “Comercio ilícito de cigarros en México”.

El estudio ya mencionado se explica que la presencia de cigarros piratas se ha dividido en dos tipos: cigarros de contrabando que ingresan al país de forma ilegal burlando los controles aduanales y los cigarros ilegales que son producidos en México, siendo el segundo grupo el que más ha crecido en los últimos 3 años en un 30%.

Así mismo, y de acuerdo con la última alerta sanitaria emitida a finales del 2021 por la COFEPRIS, existen en México más de 245 marcas de cigarros ilegales, principalmente de procedencia chinas que equivalen al 70%, entre las que destacan las marcas Win y Brass, las cuales lideran el mercado de contrabando con el 6.7% del total. Mientras que marcas como link y económicos de producción nacional, que no cuentan con código de seguridad, representan el 12.1% del porcentaje total de cigarros vendidos y consumidos en México.

Otro punto de interés para la Cámara de Comercio Americana son las importaciones ilegales en la frontera con marcas desconocidas que son fabricadas principalmente en India, Estados Unidos, Canadá y China. Debido a la existencia de fronteras que carecen de controles suficientes para la verificación de las mercancías. Se estima que el 70% del contrabando en México ingresa por la frontera sur con Belice.

Pero el mercado ilícito: falsificación y evasión del pago de impuestos, va desde aquellas cajetillas de cigarros que son una réplica del producto original hasta aquellos que intentan engañar al consumidor, con logotipos y nombres de marca muy parecidos al original, los cuales aparentan ser legales en su empaquetado y etiquetado externo pero en realidad no cumplen con el pago correcto de los impuestos aplicables. Las marcas nacionales ilícitas que se venden en cajetillas sin código fiscal, como “Económicos”, representaron el 80% de todos los cigarrillos ilícitos consumidos en México.

Finalmente y según información de la AmCham, en los últimos cuatro años se han destruido más de trece millones de productos piratas y se ha capacitado a más de 2 mil agentes aduanales. Así mismo, se sabe que cada diez mexicanos consumen mercancía pirata y es obligación personal dejar de comprar estos productos que además de representar riesgos a la salud y a la economía, perjudican también a los empresarios e inversionistas grandes y pequeños, ya que una de cada tres mercancías vendidas en mercado mexicano está dentro de la competencia desleal que evaden obligaciones fiscales.

 

PL