@guerrerochipres

Ampliar la reducción de 46% en los delitos de alto impacto y atender de manera específica, con datos y estrategias, la incidencia de cada una de las 16 alcaldías, es parte de una necesidad ciudadana que no puede detenerse por diferencias entre los partidos políticos o entre las y los alcaldes.

Todos los niveles de Gobierno están en capacidad de colaborar para converger a favor de disminuir los riesgos próximos de delitos patrimoniales y los más graves como homicidio, feminicidio, violación o secuestro.

La capital nacional reúne en este momento condiciones extraordinarias para radicalizar el combate a la impunidad: las autoridades políticas centrales pueden establecer coordinación, existen equipos de inteligencia con amplia operatividad, hay políticas sociales que contribuyen a la gobernabilidad, existe determinación política verificable.

En una palabra, puede haber estrategia de precisión contra los grupos delictivos. Puede construirse una relación de confianza entre las partes, con nuevos actores, en la que se reconozca a la CDMX como un mismo territorio, ajeno a preferencias partidistas o ideológicas.

La suma de los alcaldes es central para que la Ciudad sea una zona plena de entendimiento. En los cuatro gabinetes de seguridad y paz instalados hasta ahora se ha coincidido en que los vecinos demandan seguridad. Las y los alcaldes de Álvaro Obregón, Azcapotzalco, Coyoacán y Cuajimalpa —surgidos de fuerzas políticas diferentes a la que apoyó a la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum—, han mostrado disposición y propuesta para llegar a acuerdos y poner a la ciudadanía en el centro de la atención.

En particular me gusta la expresión de Sheinbaum: “el mejor blindaje es la colaboración”, en contraste con estrategias aisladas de presunto fortalecimiento policial.

En esas reuniones de gabinete conocidas por los medios, la articulación entre las capacidades operativas y de inteligencia de los integrantes es fundamental para el diseño de estrategias coordinadas para atender con precisión los problemas diarios.

Resultado de las instalaciones de gabinetes, Azcapotzalco y Cuajimalpa recibirán cada una alrededor de 200 elementos de la Guardia Nacional. Tendrán que estar en un cuartel para tener la cercanía con el territorio y el vínculo con los cuerpos de seguridad que ahí operan. En Coyoacán y Álvaro Obregón la coordinación definió prioridades de atención, a partir de la incidencia de delitos.

No podemos ocultar que a todas y todos nos importan nuestras preferencias ideológicas y partidistas, pero nos importa mucho más que se cuiden la justicia y la seguridad. De ahí la relevancia en la coordinación a través de los gabinetes de paz y seguridad de cada alcaldía.

La tarea está en marcha. La meta es reducir el número de delitos que se convierta en mayor tranquilidad para las familias. De ahí que más que intentar colgarse medallas por alcaldía hay que pensar en el mérito colectivo para toda la ciudad.