Francisco Diez Marina Palacios
El Banco de México (Banxico) es una de las instituciones más sólidas de nuestro país, y se encuentra entre las que le tienen mayor confianza los mexicanos. Asimismo, cuenta con un amplio reconocimiento a nivel nacional e internacional. Su tarea es crucial, pues se encarga de uno de los instrumentos más fuertes del Gobierno: la política monetaria. Su objetivo prioritario es mantener una inflación baja y estable —cercana a la meta de 3%—.
Derivado de una reforma al artículo 28 constitucional, se le otorgó autonomía el primero de abril de 1994 —hace 27 años—. El motivo principal de esta decisión fue impedir que el presidente de la República, u otra autoridad, solicitara financiamiento al Banco de manera arbitraria. Es bien sabido que un banco central autónomo es clave para el mantenimiento de un sistema financiero sano.
En el marco de la designación del nuevo gobernador del Banxico, es preciso mencionar cuáles son los requisitos para asumir dicho cargo. El artículo 39 de la Ley del Banco de México establece que: i) debe ser ciudadano mexicano por nacimiento; ii) no tener más de 65 años; iii) gozar de reconocida competencia en materia monetaria; iv) haber ocupado, por lo menos durante cinco años, cargos de alto nivel en el sistema financiero mexicano; y v) no haber sido sentenciado por delitos intencionales ni inhabilitado para ejercer el comercio o para desempeñar un puesto en el servicio público o en el sistema financiero mexicano.
El miércoles pasado, el presidente López Obrador propuso a Victoria Rodríguez Ceja —actual subsecretaria de egresos de la SHCP— para ocupar dicha posición. Horas más tarde se reflejó una caída del peso frente al dólar; el tipo de cambio se ubicó por debajo de los 22 pesos. Una nueva variable en la ecuación. Distintos expertos coinciden en que Rodríguez Ceja cuenta con poca experiencia en el ámbito monetario —el tamaño de la responsabilidad así lo exige—.
Banxico enfrenta un panorama complejo asociado al repunte de presiones inflacionarias. La semana pasada, el Inegi dio a conocer que, de acuerdo con el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), la inflación en la primera quincena de noviembre fue de 7.05% en términos anuales, su mayor nivel en 20 años. La electricidad fue la que mayor incidencia tuvo en este incremento. Cabe recordar que, en la última reunión de la Junta de Gobierno, Banxico decidió aumentar en 25 puntos base la tasa de interés interbancaria a un día para colocarla en 5.00%. La mayoría de sus miembros considera que los choques que han impactado en la inflación son de naturaleza transitoria. Al parecer, les costará trabajo a los bancos centrales del mundo ajustar los nuevos niveles de inflación —un desafío mayúsculo—.
Todo indica que, este jueves, el Senado de la República ratificará el nombramiento de Rodríguez Ceja, en sustitución de Alejandro Díaz de León. De ser así, se convertirá en la primera mujer gobernadora del Banco de México. Su compromiso es controlar la inflación, no tocar las reservas internacionales y cumplir con la autonomía del Banco Central. Es importante advertir que la política monetaria no deberá confundirse con la fiscal.
¿O será otra de las cosas que no hacemos?
Consultor y profesor universitario
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