Una de las principales causas de morbimortalidad en niños y adolescentes alrededor del mundo es el cáncer. Aunque en la infancia y la adolescencia es poco frecuente, es un problema de Salud Pública ya que es una de las principales causas de mortalidad por enfermedad en este grupo de edad y tiene un gran impacto físico, social, psicológico y económico, tanto para el paciente como para sus familiares, según el Registro de Cáncer en Niños y Adolescentes (RCNA).
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Sin embargo, en México esta realidad es preocupante debido a que el cáncer, en cualquiera de sus vertientes, es una enfermedad costosa que ocasiona un gasto de bolsillo considerable en la familia de los pacientes y puede condicionar, cierto grado de empobrecimiento, desde la perspectiva de diversas instituciones.
Por ello, la asociación Proayuda a niños con cáncer Luz de Vida A.C. y Neverías Frody y Banco de Tapitas A. C. se han dado a la tarea, como muchas instituciones más en el país, a la procuración de fondos a través de la recolección de tapitas para costear algunos gastos que van desde los tratamientos hasta para solventar algunos gastos de los familiares durante las terapias.
Banco de Tapitas, organización no gubernamental sin fines de lucro, asegura que el panorama es desalentador ya que en la última década los números de padecimientos de cáncer infantil vienen en aumento en el país.
“Las cifras indican que estamos entre 5 mil y 7 mil casos en pacientes de 0 a 21 años anuales, es una cifra bastante fuerte. Y también lo que hemos visto es que ha aumentado el grado de la etapa en la que se diagnostican, cada vez es más recurrente que sean detectados en etapas muy avanzadas”, asegura su presidente Edgar Cabrera.
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Añade que el indicador que se tiene es que entre el 70 y el 75% de pacientes inician sus tratamientos en etapas muy tardías y para ellos el panorama es complicado. Incluso, se atreven a asegurar que que la mayoría de los casos no llegan a mostrarse en la estadística nacional, como Guerrero, Chiapas y Oaxaca donde a veces ni siquiera saben que la causa de la defunción es el cáncer y eso no se contabiliza.
“Y si a eso le sumamos una disputa o diferendo entre el Gobierno, las empresas farmacéuticas y los distribuidores, lo que ha mermado la capacidad que tienen los hospitales públicos en cuanto a la disposición de medicamentos oncológicos para los pacientes que ya se atienden, por lo que los papás tienen que estar haciendo milagros o peregrinando entre distintas asociaciones para ver quién tiene cierto medicamento y seguir el curso de sus tratamientos”, asegura Edgar Cabrera, Presidente de Banco de Tapitas.
UNA LUZ DE VIDA
Gracias a diversas instituciones a lo largo y ancho del país, entre ellas la asociación Proayuda a niños con cáncer Luz de Vida A.C. y Neverías Frody los pacientes con cáncer y sus familias tienen la posibilidad de hacer una diferencia gracias a la recolección de tapitas de todo tipo –siempre y cuando sean de plástico–, pueden ayudar a solventar ciertos gastos derivados de la enfermedad.
“La recolección de tapitas es algo característico de los niños con cáncer, las asociaciones lo que hacemos es pedir el apoyo para la recolección de éstas, Luz de vida a través de la la campaña Tapitas de esperanza invitamos a hacer conciencia sobre el darle una segunda vida a ese producto, mientras también apoyamos al medio ambiente y recaudamos fondos para apoyar a las familias”, dice Diana Rodríguez, directora de desarrollo institucional de la asociación Proayuda a niños con cáncer Luz de Vida A.C.
Se tiene la creencia de que 1000 tapitas son equivalentes a una quimioterapia, pero eso no es así, pues por ellas solo pagan entre 12 y 15 pesos, por lo que mínimo se deben juntar una tonelada para que pueda ser viable para la recaudación de fondos. Dicha creencia se dio en algún momento porque hubo una alianza con alguna empresa que costeó las quimioterapias.
LA BELLEZA, TEMA SENSIBLE
Otra de las cruzadas que se realizan en pro de las niñas con cáncer es la recolección de cabello para realizar pelucas oncológicas, aunque en ocasiones son las madres que en ocasiones no soportan la presión social, mientras que las pequeñas solo las quieren para sentirse como princesas y después las olvidan.
Pero también hay jóvenes y mujeres adultas que las necesitan, por ello en Frody “estamos pidiendo a la gente que done sus trenzas de cabello porque entendemos que el 70% de los problemas emocionales que sufren las mujeres que están pasando por esta enfermedad, se debe a ello.
“Así les ayudamos a superar esta parte emocional y seguir su tratamiento con una sonrisa y hacemos las pelucas y el objetivo es ayudar a 100 mujeres. Sin embargo, para realizar una peluca se necesitan entre 6 y 7 trenzas. El año pasado, aunque estábamos en pandemia, tuvimos una gran respuesta”, comentó Beatriz Rodríguez, directora general de Neverías Frody.
Las donaciones hacen la diferencia
Es mucho lo que todavía lo que hay que hacer para bajar los índices nacionales sobre este padecimiento en todas sus formas pues el panorama es desalentador como lo muestran las siguientes cifras, pero con una acción muy simple podemos poner nuestro granito de arena a favor de la causa.
De acuerdo al Centro Médico Nacional 20 de Noviembre, en México anualmente se presentan más de 27 mil nuevos casos, con un costo de 300 mil pesos por año de tratamiento y hospitalización por paciente.
Esta enfermedad daña la salud física y psicológica, ya que al perder la cabellera el 70% de los casos caen en depresión.
En México de acuerdo con las proyecciones de la Población de los municipios de México 2010-2030 del Consejo Nacional de Población, hasta el 2018 la población de niños y adolescentes entre los 0 y los 19 años fue de 44,697,145, de los cuales 26,493,673 no cuentan con ningún tipo de Seguridad Social.
El cáncer infantil es la principal causa de muerte por enfermedad en mexicanos entre 5 y 14 años de edad, conforme a las cifras preliminares 2013 reportadas en el Sistema Estadístico Epidemiológico de las Defunciones.
México tiene un promedio anual de 2,150 muertes por cáncer infantil en la última década, según el Centro Nacional para la Salud de la Infancia y la Adolescencia.
Para donar tu cabello éste no debe estar teñido, ni en capas o maltratado; si fuera el caso hay que despuntarlo o tenerlo teñido uniforme.
Debe medir al menos 25 cms ya trenzado ya que esto permite ocupar más del 90% del cabello que fue donado, sin importar que este sea lacio o rizado.
Una tonelada de tapitas podría representar 9 mil pesos, lo que alcanzaría para una sola terapia que cuesta entre 7 y 10 mil pesos.
Estas tapitas son llevadas a recicladoras con las que se producen, principalmente, utensilios para cocina y juguetes.
LEG