La pandemia por Covid-19 tuvo como saldo la muerte de Lydia y Lawrence Rodríguez, una pareja que se contagió de la variante Delta del Coronavirus y que, desafortunadamente, dejaron a sus cuatro hijos huérfanos.
Se trata de una familia que vivía en Houston, Texas, y que por cuestiones religiosas decidieron no aplicarse la vacuna contra el virus Sars-CoV-2, según contó una persona cercana a ellos.
La enfermedad progresó hasta el grado en que tuvieron que ser hospitalizados. Su ingreso se registró el pasado 12 de julio y su salud fue decayendo hasta acabar con sus vidas.
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“No creían en las vacunas”, expresó la prima de Lydia, Dottie Jones al The Washington Post. “Intentas hablar con ellos… y eso simplemente no le gustó. No confiaba en eso, supongo”.
Sin embargo, luego de que se contagiaron suplicaron -antes de ser intubados- que sus hijos se pusieran la vacuna contra la enfermedad.
La familia asistió a un campamento cristiano donde al regresar presentaron síntomas de la enfermedad y al realizarse una prueba se confirmó el diagnóstico.
Dottie Jones se ha hecho cargo de los niños quienes son menores de edad y ha creado una solicitud en la página Gofundme para solventar los gatos que se generen por su cuidado.
“Simplemente me rompe el corazón que la gente crea en la información errónea que existe. La información errónea está matando a la gente, y tenemos que sacar la verdad”, sentenció Jones.
CT