Hace ya muchos meses, cuando las farmacéuticas anunciaron que tenían listas las vacunas y el Gobierno, bajo la presión de que su “estrategia” contra la enfermedad estaba causando muertes y contagios en cantidades grotescas, se precipitó a decirnos que tranquis, que nos iban a vacunar a todos, rápido y gratis, que la cosa ya estaba amarrada, publiqué un tuit que dice: “Principio de salud mental: sí sabes que no te van a vacunar, ¿verdad?”.

El tuit tuvo una respuesta tardía del obradorismo digital. Cuando se acercaba la elección intermedia y el Gobierno, por fin, convenientemente, se puso a vacunar a mansalva, recibí comentarios en el sentido de que tuits como ese eran parte de una campaña de descrédito, una estrategia de golpe blando. Que estábamos vacunando in-cre-í-ble. Bueno, pues no tanto. Arturo Erdely, el matemático más odiado por la 4T, publicó hace unos días una serie de números, con la claridad que lo distingue, que pone en entredicho el triunfalismo oficialista con las vacunas.

¿Qué dice Erdely? Que son 76 los millones de mexicanos que no han recibido una vacuna. ¿Tenemos entonces vacunada a casi la mitad de la población? Noup. En realidad, solo están completamente vacunados unos 28 millones de compatriotas, es decir, un 22% de la población.

Estos números no nos ponen en la lista de los grandes fracasos nacionales en inmunización, y sí, hay ejemplos virtuosos de vacunación, como el de la Ciudad de México. Pero ¿a cantar victoria? Uy. No es solo lo que nos dice Erdely. Es que mientras la enfermedad avanza como un tsunami y López-Gatell sigue a cargo de frenarla, es un decir, entre afirmaciones grotescas como que no hay evidencia científica de que la variante Delta sea más peligrosa, y mientras el Presidente insiste en que a los jóvenes no les pasa nada y por lo tanto no piensa comprarles vacunas para que vuelvan a clases, hay 18 millones de dosis en bodega. Habrán notado también que se acabaron los mariachis y las comitivas al aeropuerto para recibir 250 mil vacunas llegadas de China o Rusia, luego de la elección. Y sí, el Presidente anunció antier que los americanos van a donar hartas ampolletas, pero solo porque urge abrir la frontera terrestre, y los vecinos saben que esto, México, camina a otra carnicería viral.

Así que repito: sabes que no te van a vacunar, o al menos no a tiempo, ¿verdad? Lo pregunto por un principio de salud mental, pero también de salud de la otra, la física. Porque no nos queda, como desde el principio, más que cuidarnos. Solitos.

 

@juliopatan09