El Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) condenó el cobarde asesinato del fiscal de Justicia Indígena de Chiapas, Gregorio Pérez Gómez, quien se encontraba a cargo de las investigaciones sobre los hechos violentos suscitados en el municipio de Pantelhó, y exigió castigo para los responsables.

En un comunicado, el instituto demandó a las instancias de procuración e impartición de justicia, tanto nacionales como estatales, emprender las investigaciones correspondientes para identificar y castigar a los responsables, así como implementar acciones de apoyo y protección a familiares de la víctima.

Asimismo, consideró urgente la instalación inmediata de una mesa de diálogo interinstitucional para atender las causas de fondo que propiciaron el crimen y la violencia, con miras a alcanzar un estado de paz y justicia en las comunidades tzotziles y tzeltales.

El INPI hizo un llamado a las instancias competentes para que atiendan las problemáticas y legítimas demandas de los pueblos y comunidades indígenas de Los Altos de Chiapas, sobre todo en materia de justicia, territorio y autonomía.

Gregorio Pérez Gómez fue asesinado la noche del martes pasado, de seis impactos de bala, en una de las principales avenidas de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, y fue hallado al interior de su vehículo.

“El INPI repudia cualquier asesinato o crimen cometido contra personas indígenas(…) El instituto solicita que se investigue este caso, que la justicia se imparta de manera igualitaria y que el ser indígena no sea motivo de impunidad ante el crimen”, se indicó.

LEG