COMAR

La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) reinició el servicio de atención a extranjeros indocumentados, luego de confirmar que las autoridades de Salud detectaron un brote de Covid-19 en seis personas, mismas que se encuentran cuarentenadas, informó la coordinadora de esa dependencia Alma Delia Cruz.

Se informó que con el apoyo de la Guardia Nacional, Secretaría de Salud, Protección Civil y Servicios Públicos del Ayuntamiento de Tapachula se instrumentó el uso de cubrebocas, sana distancia, uso de gel antibacterial y respeto en las líneas de acceso a las ventanillas de atención para evitar riesgos de contagios.

La funcionaria federal, explicó que se optó por suspender las actividades para esterilizar las instalaciones y reforzar las medidas de higiene en forma estricta.

En tanto que efectivos de la Guardia Nacional actuaron con energía, pero con respeto a los derechos humanos, para evitar conatos de enfrentamiento entre los mismos migrantes que se mostraron, algunos, renuentes.

Por su parte, personal de la Secretaría de Salud realizaron consultas y verificación del estado de salud de los solicitantes de refugio.

Durante el recorrido por las calles en donde se localizan las oficinas de la COMAR y el Alto Comisionado de Ayuda para Refugiados (ACNUR) el personal médico atendió a más de una treintena de niños que presentaban deshidratación, cansancio, piel reseca y otros padecimientos menores.

Renuentes a acatar medidas sanitarias

No obstante, ante la presencia de las autoridades militares, una considerable parte de los migrantes en especial los de origen haitiano no utilizaban cubrebocas y tampoco acataban la sana distancia ni utilizaban gel antibacterial.

Desde las tres de la mañana, arribaron los extranjeros para solicitar la primera entrevista con funcionarios de la COMAR para tratar de acceder al otorgamiento de una visa humanitaria que les permita permanecer en territorio mexicano.

 

CT