Interesante un análisis que realizamos en el que damos seguimiento al incremento significativo de la Hoja de Balance de la Fed, que medido por las compras mensuales que alcanzan los 120 mil millones de dólares, ha llevado dicha hoja de 4.2 billones de dólares en marzo 2020 a 8.1 billones en julio 2021, un aumento del 98% en tan sólo un año.

Pero lo importante de todo esto es cuando lo analizamos en relación con el comportamiento de los diferentes mercados como los de renta variable Dow Jones y Nasdaq, el Índice dólar DXY y el rendimiento del bono del tesoro a 10 años.

En las bolsas por ejemplo, la correlación es alta y directa sobre rangos del 80 y 75% Dow Jones y Nasdaq respectivamente en un período de 30 observaciones, mientras que en el Índice dólar DXY, la correlación corta (nueve observaciones) es de 90% y la de 30 días en ascenso alcanza más del 40. En el caso del bono americano a 10 años, al compararse en un período de 9 observaciones, la correlación es inversa en 90%, es decir, en la medida que sube la Hoja de Balance de la Fed, el rendimiento del bono del tesoro a 10 años baja, mientras que a 30 observaciones viene a la baja y está sobre un 40%.

Con todo esto, vemos muy claro, que a la Fed por ahora, no le preocupa el incremento continuo y rápido de su Hoja de Balance. Prefiere el riesgo de una mayor inflación a una caída y consolidación de mercados que al final, deriva en menores niveles de confianza, de consumo e inversión y todo el esfuerzo que tanto el Gobierno como la Fed han dado, podrían ser en vano.

Cada vez que intenta reducir o moderar el ritmo de aumento, los mercados se reacomodan, están totalmente dependientes de la liquidez que sigue generando la Fed.

El problema que vemos, es que hacia el último cuatrimestre del presente año, la economía de los Estados Unidos estará mostrando una dinámica continua en una fase de “expansión”, que llevará a una inflación probablemente también continua y la presión sobre tasas de interés será fuerte.

Inclusive, vemos probabilidades que las bolsas americanas entren a una fase de consolidación luego de los históricos recientes.

Por otro lado, y no deja de ser relevante, la OPEP+ alcanzó ayer domingo un acuerdo que permitirá continuar transitando el desarrollo de la demanda petrolera en medio de una recuperación económica global.

Ante el incremento en la demanda mundial y caída en los inventarios de petróleo de la OCDE, la OPEP y aliados acordaron incrementar 400,000 barriles diarios cada mes a partir de agosto 2021 a septiembre 2022 para concluir con el recorte de producción total que hoy asciende a 5.8 millones de barriles”.

Quieren mantener un orden como hasta el momento sobre el desarrollo de la economía mundial, en donde los precios del petróleo registran en el año, un aumento entre el 41 y 47.5% en el caso del Brent, Mezcla Mexicana y WTI.

La oferta de la OPEP representa casi un 28% de la oferta mundial, mientras que el nivel de inventarios por ejemplo de Estados Unidos, ha caído alrededor de un 20% en el lapso de un año.

  @1ahuerta