Foto: Cuartoscuro En La Bartolina, desde hace cuatro años, se han recuperado alrededor de 500 kilogramos de restos humanos calcinados.  

El subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas Rodríguez, encabezó el acto de disculpa pública a familiares por la desaparición forzada de 27 personas, entre febrero y mayo de 2018, cometida por elementos de la Secretaría de MarinaArmada de México (Semar), en Nuevo Laredo, Tamaulipas.

“Lo hacemos en cumplimiento de nuestra obligación constitucional, para garantizar el ejercicio pleno de los derechos humanos de todas las personas, para que estas puedan realizar su proyecto de vida con libertad y sin ningún temor”, expresó.

“Lo hacemos también -continuó- en atención a la recomendación emitida por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), pero también por convicción política y por un deber ético del Estado mexicano, para que la ley se cumpla y hechos como los ocurridos en Nuevo Laredo en esos meses bochornosos de 2018, que dan cuenta de la ignominiosa actuación del Estado mexicano, no queden impunes y no se vuelvan a repetir.

Señaló que de ahí la importancia de la presentación de 30 elementos de la Semar como probables responsables de este delito, quienes comparecen ante la autoridad judicial y “esperamos que realice un proceso claro, transparente y justo para deslindar responsabilidades y castigar a los culpables”.

Subrayó que el Estado mexicano envía un mensaje irrefutable para continuar encarando este problema sin dobleces, sin sumulación y con firmeza.

Cabe recordar que en el ejido La Bartolina, en Matamoros, Tamaulipas, fue utilizda por la delincuencia organizada como un sitio clandestino para la cremación de personas. Hace dos años circuló un video donde aparecieron hombres sin vida, desnudos, siendo “preparados” para colocarlos en tambos para su incineración. “Aquí Cártel del Golfo cocinando mugrosos”, presumió uno de los hombres que estaba al mando de la operación.

La Bartolina se ubica a 25 kilómetros de Matamoros, cerca de la frontera con Brownsville, Texas, donde desde 2017 se han recuperado, al menos, 500 kilogramos de restos humanos calcinados.

 

LEG