Entre 2019 y 2020, Chiapas (181%), Coahuila (52%) e Hidalgo (24%) fueron las entidades que reportaron un mayor crecimiento en el número de tomas clandestinas que se utilizan para la ordeña de huachicol.

Destaca el caso de Hidalgo que entre diciembre de 2018 y el cierre de 2020, reportó un aumento de dos mil 883 tomas clandestinas, que representa 137%.

En respuesta a una solicitud de información, Petróleos Mexicanos (Pemex) detalló que a nivel nacional, en 2019 se registraron 13 mil 137, mientras que en 2020 se reportaron 11 mil 22, lo que refleja una disminución del 16%.

En tanto, de enero a febrero de 2021, se han documentado mil 901 tomas clandestinas. En dicho periodo los estados que encabezan la lista en este ilícito son: Hidalgo, 794; Puebla, 449; Estado de México, 207; Michoacán, 65; Guanajuato, 63; Tlaxcala, 53; Querétaro, 46; y Baja California con 42 tomas.

Infografía: Xavier Rodríguez

ANTECEDENTE TRÁGICO

El 18 de enero de 2019, se registró una explosión de un oleoducto en Tlahuelilpan, Hidalgo, que dejó como saldo 137 muertos y más de 70 heridos. En esa ocasión, Pemex señaló que el accidente fue por la manipulación de la toma clandestina para robo de combustible.

Ean tanto, la Fiscalía General de la República (FGR) inició una carpeta de investigación por los hechos.

Respecto a las tomas clandestinas localizadas para el robo de gas LP, que también es una modalidad del huachicol las entidades que tuvieron un aumento fueron: Tabasco, 400%; Chiapas, 300%; Querétaro, 223%; Tlaxcala, 155%; y Puebla con 79%.

A nivel nacional, en 2019 fueron del orden de mil 305 tomas clandestinas, mientras que en 2020 se registraron dos mil 55, es decir, un aumento de 57%.

En el primer bimestre de este año, se han contabilizado 449, siendo Puebla el primer lugar con 342; Tlaxcala, 43 y el Estado de México con 39.

Daniel Oswaldo Alvarado Martínez, investigador en temas de seguridad pública, comentó que no hay tiros de precisión para prevenir el robo del hidrocarburo.

“Pemex no tiene control. Hay instrumentos donde pueden medir cuánto flujo de líquido pasa por un tubo, entonces si en cada kilómetro colocan este tipo de medidores se puede captar el problema de la fuga o de la ordeña del ducto. Estos sistemas son muy precisos”, señaló.

Alvarado Martínez destacó que el conflicto de las tomas clandestinas es porque han hecho base social. “Cada vez más personas viven de vender gasolina robada, por ejemplo, el famoso Toñín, Antonio Valente Martínez, uno de los huachicoleros más fuertes de Puebla, el año pasado en la zona norte de la entidad, repartió un tráiler repleto de verduras entre la población, entonces la base social se puede convertir en halcones voluntarios”, apuntó.

LEG