El torneo Guard1anes 2021 terminó en su segunda fase y ahora si vamos por la fiesta grande con sus ocho invitados rumbo a la gran final y a conocer al nuevo campeón del futbol mexicano, y por lo pronto, encontramos una gran sorpresa, porque creo que muy pocos apostaron que Puebla o Atlas serían semifinalistas, algo que va a ocurrir en una semana.

En busca de los otros tres semifinalistas encontramos dos encuentros muy interesantes donde hay favoritos por lo realizado en la etapa de clasificación, Cruz Azul y América tienen que ser marcados como superiores a Toluca y Pachuca por lo realizado en el Clausura 2021 y la diferencia de puntuación que tuvieron, pero ya sabemos que en Liguilla puede pasar de todo, y ahora son 180 minutos para ganar y no los puntos.

Finalmente, también Monterrey y Santos tendrán su duelo, con mucha rivalidad de por medio entre estos dos planteles, que no podrán guardarse nada o de lo contrario verán finalizar su competencia.

Eso es lo que está por venir, pero atrás han quedado cuatro fracasos muy fuertes, porque se quedaron sin Liguilla el campeón y subcampeón del torneo pasado, lo de León y Pumas es muy fuerte, porque en menos de seis meses cambiaron una barbaridad su nivel y su capacidad, y que decir de Guadalajara y Tigres, equipos planeados para ganar, para estar entre los mejores y simplemente no están ahí.

León nunca pudo resolver su falta de gol, los problemas internos y ausencias claves fueron determinantes y termina así tristemente la época de Nacho Ambriz con los esmeraldas 

Lo de Tigres fue parecido, lo interno fue matando al grupo, bajas de juego en piezas importantes, un plantel que no pudo con las ausencias y que terminó siendo corto, así también termina una época dorada de Ricardo Ferretti.

En Chivas las cosas siguen en un nivel bajo, no levantan y demuestran que los “chicotazos” fueron más un detalle de suerte que de realidad futbolística, Vucetich le buscó, se equivocó, pero es un plantel corto, lleno de promesas sin peso para poder aspirar a más.

Y Pumas es el reflejo de falta de experiencia para manejar un equipo, porque si Lillini se perdió y hasta se peleó con su gente, los jugadores nacionales y extranjeros no se supieron manejar con humildad y trabajo para mantenerse en lo alto, aquí aplica perfecto aquello que lo difícil no es llegar, sino mantenerse.

En los fracasos de estos equipos hay que incluir a directivas, cuerpos técnicos y jugadores, con porcentajes diferentes, pero no se puede señalar sólo a una persona como el causante de la derrota, aunque casi siempre se señala al técnico en forma equivocada.

Pero eso es pasado, algunos a curarse las heridas y otros a disfrutar el éxito en la fiesta grande.

 

@raulsarmiento