Muchos aplaudieron esta semana que el panel de supervisión de Facebook decidiera mantener al expresidente estadounidense Donald Trump excluido de la plataforma por considerar sus mensajes violentos, de odio y de riesgo para la nación.

Sin embargo, la decisión pudo haber llegado demasiado tarde, señaló en entrevista con 24 HORAS el especialista de la UNAM Luis Ángel Hurtado.

“Desde que las televisores cortan la transmisión del aún Presidente hablando de un fraude electoral fui crítico, es una decisión que se toma cuando Donald Trump está en la cúspide de su derrota”, narra el investigador en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales.

“Si el origen de todo este debate es garantizar la libertad de expresión, garantizar el derecho a la información, ¿por qué no lo hicieron cuando llegó a la presidencia?”, agrega, “esta persona estaba mintiendo, incitando al odio y la polarización, ¿por qué no bloquearlo para evitar precisamente el escenario posterior?”.

No lo hicieron, considera, porque en ese momento el republicano tenía el poder económico de su parte, era presidente y tenía el poder político.

Con ello, pudo haber llamado a una propuesta de ley en la cual se regularan las redes sociodigitales, entre ellas a Facebook y a Twitter.

El presidente 45 tenía 88 millones de seguidores en Twitter y 35 millones en Facebook y utilizaba sus cuentas personales más que las oficiales, incluso para declaraciones políticas. Sus críticos sostienen que reiteradamente violaba las normas de las redes contra las expresiones de odio o abusivas pero hasta los meses finales de su mandato, publicaba todo lo que quería sin que nadie filtrara sus mensajes.

El debate sobre la libertad de expresión y la regulación de las plataformas surgió desde 2016, recuerda el académico, derivado de las elecciones en Estados Unidos y distintos procesos electorales. Otro caso fue el Brexit en Reino Unido y otro el referente al proceso de paz en Colombia, cuando se llama a una consulta ciudadana y los sondeos difieren de los resultados formales.

CON LA COLABORACIÓN DE ELIZABETH RIVERA / FES ARAGÓN

 

LEG