Una encuesta levantada entre personas privadas de la libertad, en Michoacán, devela que entre menor es el nivel educativo de las personas bajo proceso o sentenciados, mayor fue su participación en delitos graves, como secuestro y homicidio, además de que 18% soñaba con ser sicario.

En rueda de prensa, el secretario de Seguridad Pública, Israel Patrón Reyes, informó que se levantó la encuesta entre mil 200 personas que se encuentran en algún penal de la entidad y de ello se obtuvieron los siguientes resultados: “El 54.6% de personas privadas de la libertad fueron hijos de padres divorciados; vivieron casados, en unión libre y solteros, carentes de compromiso, criados por sus abuelos y algunos solos; con una alta correlación entre el nivel educativo y los delitos”, dijo el funcionario estatal.

Tiene 100% bajo nivel educativo

Destacó que “100% de las personas juzgadas o procesadas por delitos del crimen organizado solo tienen primaria, incidieron en los delitos más graves y más violentos”, mientras que están muy por debajo las cifras de personas con licenciatura en la cárcel, siendo los delitos sexuales los más comunes.

La encuesta referida arrojó como resultados que el perfil criminológico que quien hoy se encuentra privado de la libertad son individuos que desarrollaron su identidad en 2007, cuando había un cartel hegemónico, lo que repercutió en el desarrollo de anhelos de ser sicarios.

Asimismo, relató el funcionario que el principal argumento de quienes abandonaron la escuela fue por los bajos ingresos, problemas financieros y desempleo, además de referir haber sufrido violencia física y psicológica durante su infancia y adolescencia.

 

LEG