Desde hace muchos años, en diferentes foros y múltiples discusiones, siempre he defendido la idea de la necesidad de coexistir el talento de los deportistas con un entrenador capaz de explotarlo y detonarlo hasta sus mejores expresiones, al mismo tiempo de manera Inevitable un arbitraje o jueceo de primer nivel y unos directivos con relaciones nacionales e internacionales suficientes como para garantizar las gestiones necesarias tanto para proteger a los atletas en sus participaciones como para lograr incorporarlos al concierto mundial en las mejores condiciones posibles.
En el caso del ajedrez mexicano ya tenemos más de un año trabajando con un programa de alto rendimiento, respaldado por el estímulo fiscal para el deporte, (EFIDEPORTE), un programa de la Secretaría de Hacienda en el cual también interviene la Comisión Nacional del deporte en la revisión y autorización de los programas sometidos a consideración del comité correspondiente para su autorización y con el patrocinio directo de Banorte.
Al día de hoy contamos con más de 300 participantes incorporados a entrenamientos en línea, campamentos, torneos de entrenamiento y competencia. los resultados al día de hoy son estimulantes y parecen indicar que nos encontramos en la ruta correcta.
El gran trabajo de parte del maestro internacional Pablo Della Morte quién ha estado a cargo de la estructura ajedrecística del programa y el control y manejo de entrenadores torneos y jugadores ya se ha reflejado en una mejora significativa en cuanto al resultado y nivel de nuestros competidores en diferentes eventos y torneos en los que se ha participado.
La gestión del ámbito internacional, vicepresidente y director técnico de la federación Nacional de ajedrez, Enrique Zaragoza, resultado en el factor clave para lograr consolidar la aprobación y autorización de nuestros planes y programas en el marco de las reglas de operación definidas por Hacienda para la participación en el programa de estímulo fiscal.
La preocupación permanente por lograr desarrollar al cuerpo de entrenadores con una profundidad mucho mayor, y plenamente conscientes de la ausencia de un modelo pedagógico para el entrenamiento en México, me permito hacer público el convenio de trabajo logrado por la Federación Nacional de Ajedrez de México con el gran maestro Jacobo Aggard, uno de los autores más prolíficos en nuestra disciplina así como fundador de una editorial y de una academia de entrenamiento, es necesario hacer mencionar que en su momento ya fue presidente de la comisión de entrenadores de la federación internacional de ajedrez.
Además de la gran cantidad de jugadores desarrollados por él, hasta el nivel de la gran maestría, me parece prudente puntualizar que su aporte más significativo es la elaboración de un modelo de desarrollo del entrenamiento, esto es, una metodología para entrenar y desarrollar jugadores al máximo nivel posible.
El día de hoy nuestro grupo de entrenadores del programa de alto rendimiento tomó parte en la primera sesión del curso de desarrollo de entrenadores de Jacobo Agaard, el cual tendrá una duración de 6 meses, básicamente generará dos productos importantes: el primero, el desarrollo consistente de una metodología base para todos nuestros entrenadores y el segundo, un manual de entrenamiento para el desarrollo de entrenadores en México y el cuál será base para multiplicar los conocimientos que se adquieran gracias al contacto con uno de los mejores entrenadores del mundo.
Ya habrá oportunidad de hablar a detalle de algunos de los puntos más importantes de la información generada en este curso así como del análisis que el gran maestro Jacobo Agaard hace del ajedrez en diferentes partes del mundo, en Latinoamérica y en México.
En este momento podemos celebrar el hecho de estar recibiendo formación, para nuestros entrenadores, al nivel de la élite mundial.
No puedo cerrar esta colaboración del día de hoy sin hacer un agradecimiento a nombre de toda la familia ajedrecística del país al secretario de Hacienda al maestro Arturo Herrera Gutiérrez, quien se ha convertido al día de hoy en una bendición para el desarrollo del ajedrez mexicano, nada de esto sería posible sin su sensibilidad y respaldo.
Falta mucho por hacer, perdimos muchos años sin desarrollar la parte técnica, parece ser estamos retomando el camino, ojalá así sea por el bien de tanto talento y potencial que existe entre los niños y jóvenes de nuestro país para la práctica del deporte ciencia.