El sector bancario perdió 107 mil millones de pesos, cantidad que dejaron de pagar aquellos usuarios que se inscribieron en los programas de diferimientos del año pasado, apoyos que fueron emitidos con la intención de mitigar los efectos de la pandemia por Covid-19, refirió la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).

Al respecto, Juan Pablo Graf, presidente de la CNBV, señaló a lo largo de su participación en la ceremonia de inauguración de la 84° Convención Bancaria, que dichos créditos equivalieron al 10% del total de los correspondientes al programa de apoyos.

Refirió que dichos apoyos en noviembre del año pasado registraron un Índice de Morosidad (IMOR) con una conducta al alza. La morosidad en estos créditos pasó de 1.4%, en noviembre, a 5.3% para enero de este año.

Ante dicho panorama, afirmó que para hacerle frente a la pandemia, que inició como una crisis sanitaria y se transformó en una crisis económica, la banca debe de contar con mayor accesibilidad a sus recursos.

“La recomendación es preservar sus recursos para estar en mejor posición de absorber potenciales pérdidas como resultado de la pandemia y contar con mayor disponibilidad de recursos para otorgar créditos”, agregó.

Advirtió que los ciberataques a la banca digital crezcan, debido a la sofisticación por parte de los cibercriminales que va en aumento.

Frase:
“Las familias que recibieron este apoyo (diferimientos de pago) pudieron usar los recursos para afrontar otros desafíos que afrontaron por la pandemia”

Puntos clave:

Recomendaciones

– Que los bancos mejoren su posición financiera para potenciales pérdidas.
– Mantener solvencia para tener disponibilidad de recursos para otorgar créditos.
– Alertó sobre un posible incremento en los ciberataques.
– Previó un incremento en la morosidad.
– Tener accesibilidad de recursos.

LEG