A 15 años del homicidio de los hermanos Peña Coss, en Monterrey, Nuevo León, el responsable Diego Santoy, enfrentó la ratificación de la condena de 71 años, 7 meses y 27 días que pesa en su contra.
Lo anterior, luego de que la defensa de Santoy pidiera reabrir el caso, debido a supuestas irregularidades en el proceso penal anterior.
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Con la determinación, la cual es definitiva, el llamado “asesino de Cumbres” tendrá que cumplir la pena impuesta por los delitos de homicidio calificado, en grado de tentativa, robo calificado y privación ilegal de la libertad en su carácter de secuestro.
A mediados de febrero, un Tribunal Colegiado en Materia Penal ordenó que se repitieran siete careos con Santoy después de que su defensa ganara un amparo, lo que, finalmente, no sirvió a los intereses de los legistas.
En marzo de 2006, Diego Santoy asesinó a los dos hermanos menores de quien entonces era su novia, Erika Peña Coss, cuando esta se negó a reanudar la relación sentimental que había finalizado después de tres años.
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Tras cometer el crimen, Diego intentó degollar a Erika y luego secuestró a la empleada doméstica de la familia para, finalmente, robar un automóvil y huir de Nuevo León junto con su hermano.
“El asesino de Cumbres” fue detenido pocos días después en Oaxaca, mientras viajaban en un autobús con destino a Guatemala.