Notorious B.I.G., el rapero cuyo estilo gutural dio un fuerte impulso al hip hop y le convirtió en una de las mayores figuras del rap de todos los tiempos, ha sido una fuente de fascinación desde su impactante asesinato a los 24 años.

Uno de los hijos favoritos de Brooklyn, el artista es ahora tema del documental Biggie: I Got a Story to Tell (Biggie: Tengo una historia que contar) basado en sinceras entrevistas con miembros de su familia y amigos, que Netflix estrenará el 1 de marzo.

El largometraje, que analiza el meteórico ascenso y muerte de este artista llamado Christopher Wallace, llega casi un cuarto de siglo después de su fallecimiento en un tiroteo desde un vehículo durante una visita a Los Ángeles, el 9 de marzo de 1997, con apenas un álbum de estudio publicado -Ready To Die- en su carrera. El segundo, Life After Death, se editó 16 días después de su muerte.

Autorizada por su entorno, y coproducida por su madre, la cinta reconstruye la breve pero explosiva vida de Biggie: un alumno de una escuela católica criado por una inmigrante jamaicana en Brooklyn, que de la noche a la mañana pasó de vender crack en su zona a convertirse en una sensación del rap con una influencia imperecedera.

El documental retrata con sensibilidad a un hombre que deseó la gloria de la fama y el éxito pero también la seguridad para su familia, y que fue también un artista que enorgulleció a su ciudad.

“Tuvo una vida con un efecto muy profundo”, valoró el magnate de la música y coproductor del documental Sean Combs, conocido entonces como Puff Daddy y ahora P. Diddy.

Icono mundial

La muerte a tiros de su amigo Olie está entre los temas que llevan al documental desde los humildes orígenes del rapero hasta la cima. Una conmoción y dolor que le sacudieron de nuevo cuando el también icono del rap Tupac Shakur fue asesinado en 1996.

La narrativa popular dice que ambos fueron asesinados como parte de una pelea entre sus sellos discográficos, pero algunos historiadores musicales piensan que ese enfrentamiento entre costas está exagerado.

El documental lo minimiza como rumores, como ya había hecho el propio Biggie en su última entrevista en California, el 5 de marzo de 1997.

Después de referirse a esos supuestos enfrentamientos como habladurías, Biggie asegura que su plan es “continuar haciendo esas canciones que te hacen bailar, disfrutar y tener hijos”.

“Vamos a seguir haciendo lo nuestro para siempre”, asegura. “Por siempre”.

LEG