La vigilancia epidemiológica, a cargo de la Secretaría de Salud, presentó deficiencias en su diseño y operación durante 2019, año previo a la pandemia de Covid-19, informó la Auditoría Superior de la Federación (ASF) en su informe a la cuenta pública del primer año de Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
De acuerdo con el documento, se difundió información de 134 de las 150 enfermedades sujetas a vigilancia, lo que implicó que, para 16 enfermedades, no se favoreciera la accesibilidad a la información para la población y los tomadores de decisiones.
En el año previo a la pandemia, tampoco no se elaboró el diagnóstico para identificar las necesidades de formación y capacitación en materia de vigilancia epidemiológica; no se implementaron mecanismos de coordinación con los Laboratorios Estatales de Salud Pública (LESP) para estandarizar su operación.
Tampoco se sustentó que la distribución de los recursos para la vigilancia epidemiológica se realizara con base en las necesidades de salud de la población de cada entidad federativa, y no se evaluaron los criterios de sistematicidad, continuidad, oportunidad y confiabilidad de la información sobre las condiciones de salud de la población, en cada uno de los sistemas de vigilancia.
“En lo que se refiere a los mecanismos de recolección de la información. Estas deficiencias no aseguraron la calidad y oportunidad de la información generada, ni que dicha información fuera utilizada para tomar decisiones, a fin de aplicar las medidas de prevención y control necesarias para proteger la salud de la población”, advirtió la ASF.
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MGL