La estrategia global COVAX -coordinada por la Organización Mundial de la Salud (OMS)-, ya puede echar mano de la vacuna de AstraZeneca/Oxford para comenzar la distribución de la sustancia en los países de medianos y bajos recursos, con nulos o limitados contratos bilaterales con firmas privadas.

La OMS aprobó ayer dos versiones de dicho biológico contra el Covid-19 para uso de emergencia, una producida en colaboración con SKBio, en Corea del Sur; y otra con el Serum Institute de la India.

“Ambas compañías producen la misma vacuna, pero se fabrican en diferentes plantas y requieren aprobaciones separadas”, explicó la víspera el director de la agencia de la ONU, Tedros Adhanom Gebreyesus.

Hace unos días, la OMS dio a conocer que prevé distribuir 236 millones de dosis de la vacuna de AstraZeneca/Oxford en los primeros seis meses de 2021; así como 1.2 millones de dosis de una primera entrega de emergencia de la vacuna de Pfizer.

El objetivo es suministrar vacunas para al menos 20 por ciento de la población de los países participantes. Algunos de ellos, como Bolivia, Honduras, Nicaragua y El Salvador, las recibirán sin pagar. COVAX ha asegurado 2 mil millones de dosis de vacunas para el mundo, al margen de planes nacionales.

El Listado de Uso de Emergencia al que se sumó la vacuna evalúa la calidad, seguridad y eficacia de los proyectos y es un requisito previo para el suministro de vacunas de las instalaciones COVAX. También permite a los países acelerar su propia aprobación regulatoria.

La de AstraZeneca es la segunda vacuna que es aprobada para su uso de emergencia, la primera fue Pfizer-Biotech.

FRASE

“Necesitamos aumentar la producción y que los desarrolladores nos envíen los expedientes al mismo tiempo que a los reguladores de los países de ingresos altos”

Tedros Adhanom Gebreyesus
Director de la OMS

Infografía: Xavier Rodríguez

Mezquindad y vacunas en Perú

AFP

Perú quedó sumido ayer en un escándalo de corrupción en plena pandemia, tras revelarse que altos funcionarios fueron presuntamente vacunados contra el Covid-19, antes de la campaña oficial de inmunización.

La tormenta política estalló cuando el diario limeño Perú21 publicó que el entonces presidente, Martín Vizcarra había sido vacunado en octubre, semanas antes de ser destituido por el Congreso.

La primera vacunación anticovid-19 ocurrió en Gran Bretaña en diciembre pasado, tras las fases de prueba de las vacunas de varios laboratorios en numerosos países.

Vizcarra se defendió diciendo que fue voluntario en el ensayo clínico de la vacuna china de Sinopharm en Perú, antes de que la misma recibiera luz verde el 31 de diciembre… pero la universidad a cargo del estudio negó que el mandatario formara parte de la prueba.

La tormenta derivó en huracán este fin de semana, cuando la canciller del actual presidente interino Francisco Sagasti, Elizabeth Astete, reconoció que ella se vacunó el 22 de enero y dimitió. Ella fue la segunda ministra de Sagasti en caer por el asunto de las vacunas, después de la ministra de Salud, Pilar Mazzetti, el viernes pasado.

Aventaja Chile en vacunación masiva

Chile comenzó a vacunar contra el coronavirus a sus profesores de colegios con miras a reanudar las clases presenciales en marzo, tras casi dos semanas de un masivo programa de inmunización que ya benefició a más de 2 de sus 19 millones de habitantes.

Los maestros (se estima que unos 500 mil) iban a ser vacunados a fines de mes, pero el Gobierno decidió adelantar el proceso para evitar que los colegios permanezcan cerrados.

OMS da aprobación de emergencia para la vacuna AstraZeneca

LEG