Por Karina Aguilar Vega

Decir verdades a medias en conferencias de prensa y hacer afirmaciones que después se tienen que aclarar, es una cosa, pero cuando involucras a la Fuerza Aérea, al presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, a gobernadores y a secretarios de Estado para “inaugurar” un aeropuerto que no está terminado y que todavía no se puede usar, es muestra de demagogia pura.

La semana pasada, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, presumió la inauguración de una pista de la base militar de Santa Lucía, como si fuera la nueva terminal aérea que asegura, entrará en funcionamiento en marzo de 2022.

Y para no variar, dijo que su proyecto aeroportuario que sustituye al de Texcoco, se convertirá en el mejor del mundo, nada más lejano a la realidad y muy cercano a las fake news.

Por ello, para combatir la demagogia, existen los hechos: El Aeropuerto Felipe Ángeles, tendrá dos pistas civiles y una militar y atenderá 19.5 millones de pasajeros al año. La mano de obra está a cargo del Ejército, por lo que no hay generación de empleos directos.

El cancelado aeropuerto de Texcoco tendría tres pistas y podría alcanzar seis en las siguientes etapas, contaría con 95 puertas de embarque, una capacidad de recibir hasta 70 millones de pasajeros y sería el proyecto de mayor generación de empleos en América Latina, con hasta 500 mil plazas de trabajo.

El mejor aeropuerto del mundo es el de Changi de Singapur, tiene cuatro terminales y un flujo de 85 millones de pasajeros al año, salas de arte, jardines, tecnología de punta; es decir, todos los extras que, por austeridad, no tendrá el Felipe Ángeles, que lejos, muy lejos está de ser el mejor del mundo.

Todo parece indicar que el camino a la denominada Cuarta Transformación está siendo más difícil de lo que pensó su principal promotor, pues recurrir al engaño, la estafa y la demagogia son recursos fáciles, ante la falta de resultados.

Y en Pregunta Sin Ofensa:

Han pasado más de dos meses desde que inició el registro para el apoyo funerario por Covid-19 y hasta el momento, el 60% de los familiares, no han recibido el recurso del DIF Nacional ¿ineptitud o insensibilidad?

 

DAMG