Los responsables de Tokio 2020 confirmaron este miércoles que se reunirán el viernes para hablar de las palabras sexistas realizadas la semana pasada por el presidente del comité organizador de los Juegos, Yoshiro Mori, que provocaron un escándalo.

Los miembros del consejo ejecutivo de Tokio 2020 se reunirán el viernes para “expresar sus puntos de vista sobre las palabras de Mori” y discutir “futuras iniciativas” del comité organizador en materia de igualdad de sexos, según un comunicado.

El pasado 3 de febrero, Mori, un antiguo primer ministro japonés de 83 años, había declarado que las mujeres hablaban demasiado tiempo durante las reuniones de los consejos de administración, lo que para él era “molesto”.

Se excusó torpemente al día siguiente durante una rueda de prensa, excluyendo dimitir.

Pero la presión sobre Mori y Tokio 2020 no ha disminuido desde entonces, más bien al contrario.

El miércoles, la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, declaró que no estaba entre sus planes asistir a una reunión de todas las partes de los Juegos, prevista más tarde este mes, con las palabras de Mori como fondo.

Uno de los patrocinadores más importantes de los Juegos, el gigante del automóvil japonés Toyota, puso más fuego al tema este miércoles.

“Es lamentable que los comentarios del jefe del comité de organización (de Tokio-2020) vayan en contra de los valores que defendemos en Toyota”, según una declaración escrita del presidente del grupo, Akio Toyoda, leída por uno de sus adjuntos en el marco de una rueda de prensa sobre los resultados financieros del constructor.

Palabras “absolutamente inapropiadas”

De los 54 patrocinadores de los Juegos que respondieron a un sondeo de la cadena de televisión pública NHK, 36 estimaron que las palabras de Mori eran “inaceptables”, aunque ninguno mostró intención de anular sus compromisos.

El martes, el Comité Olímpico Internacional (COI), que había primero considerado cerrado el asunto tras las excusas de Mori, terminó también por juzgar las palabras como “absolutamente inapropiadas”.

Deportistas como la estrella japonesa del tenis femenino Naomi Osaka, voluntarios para los Juegos Olímpicos, miembros del personal de varias embajadas en Tokio o parlamentarios de la oposición en Japón, protestaron también de diversas maneras estos últimos días, mientras que una petición en línea reclamando medidas tras el caso Mori ya ha recogido 145.000 firmas.

Este escándalo es una nueva espina para los organizadores de Tokio-2020, que tratan de que se recupere el entusiasmo para los Juegos (23 de julio-8 de agosto de 2021), aplazados el año pasado debido a la pandemia, cuando el contexto sanitario mundial sigue siendo preocupante.

PAL

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