Apenas fue presentado como compañero de Max Verstappen, y Sergio Pérez ya dejó en claro que las cosas en Red Bull son muy diferentes al resto de los equipos para los cuales pilotó. De inmediato tuvo su primera reunión con Adrian Newey, jefe de diseño de la escudería, y Checo quedó “impresionado”.
Adrian Newey se encumbró en la cima de la Fórmula Uno con el diseño de los monoplazas de 2010 hasta 2013, lapso en el que Red Bull dominó la máxima categoría del automovilismo.
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En los cuatro años fueron campeones del mundo en la categoría de constructores y de pilotos. El alemán Sebastian Vettel fue quien les dejó los títulos en las vitrinas de Res Bull.
Cuando llegó Checo Pérez acompañado de Christian Horner, director de Red Bull, fue a la oficina del jefe de diseño Adrian Newey, y lo primero que dijo el tapatío fue: ¿Estás dibujando ahí? ¿Puedo verlo? Al tiempo que señalaba un pizarrón físico y no una digital, lo cual impresionó a Pérez.
“Me impresiona mucho ver su pizarra para dibujar. Es impresionante. Cada vez que pasas por delante está dibujando algo. La forma en que te habla como piloto también dice algo. Es como si estuvieras hablando con otro piloto”, sentenció Pérez sobre sus primeras impresiones como piloto de Red Bull.
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