Luis Miguel Martínez Anzures

Los días siguen transcurriendo, pero a medida que el tiempo pasa aún no se logran apreciar grandes cambios en materia del combate epidemiológico que se espera puedan desplazar muchos países en el mundo para combatir esta preocupante pandemia que toda la comunidad internacional esta sufriendo.

Al respecto es importante mencionar que el mundo ya comenzó el proceso de vacunación a mediados de diciembre. De acuerdo con los últimos datos, hasta ahora van cerca de 30 millones de vacunas aplicadas. Pero es insuficiente.

Entre el 15 de diciembre y el registro de la primera quincena de enero, el número total de contagios se ha incrementado en 18.6 millones de nuevos casos y el número de fallecidos subió en 320 mil personas en todo el mundo. Se trata de un promedio de 744 mil nuevos contagios y de 11 mil 428 fallecidos a diario.

Hasta ahora el concentrado internacional nos dice que existen 91.6 millones de contagiados confirmados y un millón 960 mil muertos en todo el globo terráqueo. La velocidad de la propagación de este virus confirma las aseveraciones emitidas por la Organización Mundial de la Salud cuando pronosticaron que lo peor estaba por venir en el gélido invierno.

A la larga, la especie humana sabe que le ganará la partida al virus y que, como en otros momentos de la historia en situaciones parecidas, esta pandemia quedará como un capítulo oscuro en el camino del devenir existencial de la humanidad. Aunque este punto aún se ve lejano.

En el corto plazo se necesita comprender que todavía la humanidad se encuentra en el momento más álgido de la guerra y que, de no tomar las medidas sanitarias adecuadas, habrá aún muchas bajas y mucho dolor en la mayor parte de las sociedades.

Los únicos países que se pueden preciar de haber controlado la enfermedad son algunos asiáticos, de manera destacada China, que ha sido conocido como el epicentro de la pandemia. Los nuevos contagios en este país asiático en el lapso que se está analizando suman dos mil 558, un promedio de 91 nuevos por día. En contraposición, en Europa el crecimiento de los contagios en ese mismo período fue de 5.97 millones, un promedio de 213 mil nuevos contagios por día.

Mientras que en Estados Unidos la situación sigue en estado de emergencia. Los nuevos contagios en el lapso que se ha citado fueron 5.84 millones, un promedio diario de 208 mil.

La nueva administración de Joe Biden, que comenzará en menos de una semana, va a llegar con la peor crisis de salud de la historia reciente de Estados Unidos, tanto en la parte económica como con una afectación histórica en el ya colapsado sistema de salud pública de aquel país. Tendrá por delante grandes retos que deberá enfrentar sin duda alguna.

Pero, más allá de que el nuevo Gobierno demócrata acelere el proceso de vacunación, es muy probable que tenga que instrumentar un conjunto de medidas restrictivas durante los primeros meses de su administración para desarticular las cadenas de contagio que se han propagado por toda la nación.

En el caso de México la situación es preocupante y presenta grandes áreas de oportunidad con relación a la planeación estratégica y la ejecución de la campaña masiva de vacunación que se pueda instrumentar en las semanas que estan por venir. Lo que más urge y hay que entender, es que es prioritario volver a reactivar la economía del país que, hasta ahora en palabras del secretario de Hacienda y Crédito Público, se espera llegue a los márgenes del 8 o 9% en su decrecimiento.

Los números en territorio nacional dicen que el número de contagios nuevos del 15 de diciembre al 15 de enero del presente año fue ligeramente superior a 304 mil casos; además, el número de fallecidos en ese lapso fue de 21 mil 818 personas. Mientras que los promedios diarios fueron de 10 mil 480 y 752 respectivamente.

Así como en otros países, México se encuentra en el peor momento de la pandemia la curva de contagios se ha disparado de manera exponencial y por supuesto esto responde a diferentes factores entre ellos: el cambio de temperatura, la falta de disciplina y concientización del problema entre la sociedad mexicana, una decreciente capacidad institucional que brinde una respuesta a los problemas ocasionados por el virus, entre otros factores.

Pero este panorama no es exclusivo de este país. Prácticamente en todo el hemisferio occidental los contagios se dispararon en las últimas semanas.

Es muy probable que las sociedades se enfrenten a un virus que desarrolla nuevas armas. El caso de la llamada variante británica, que es más contagiosa aún que el virus original, es apenas una de las posibles mutaciones que deberán ser enfrentadas en el futuro inmediato.

Quienes pensaban que el 2021 podría ser un año en el que se regresaría a algo parecido a la normalidad ya pueden ir olvidándose de esa idea. Aun queda un largo camino por recorrer en el regreso hacia el retorno a la masificación de la convivencia humana y la recuperación económica.

                                                                                                                   @Drlmma56