Los principales síntomas asociados a estar en cuarentena, y que se han reportado, refieren un bajo estado de ánimo, irritabilidad, insomnio, enojo y un cansancio emocional, externó la psicóloga Leticia Zúñiga, especialista en terapia cognitivo conductual.
Pero también, dijo, hay factores que inciden en estos niveles de estrés que pueda presentar la población, factores que tienen que ver con el manejo de la información y de los recursos de cada persona.
La especialista manifestó que un factor estresante es, sin duda, la duración, “evidentemente que la duración de una cuarentena debe ser lo suficiente para contener un brote local, y reducir la dispersión del virus, y una mayor duración del cierre, está asociada con una menor calidad en la salud mental de la población”, externó.
Otro factor, dijo, es el miedo; “el miedo a enfermarte, miedo al desastre, a tener una infección, a contagiar a la gente que se ama, y esto se ha demostrado que es más frecuente en las mujeres embarazadas, y con la población infantil”, dijo.
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La frustración es otro factor, señaló Leticia Zúñiga, lo mismo que el aburrimiento, la abstinencia de una rutina, “la pérdida del contacto social puede ser particularmente estresante para muchos de nosotros, lo cual no solo tiene un impacto en la salud mental, sino que también decrece la energía, y puede también ser el detonador para el consumo de algunas sustancias adictivas, como lo puede ser el alcohol”, externó.
El hecho de tener una información adecuada, puede favorecer a la reducción de estrés, sin embargo, dijo, si de parte de los organismos de salud existe una falta de claridad, una ausencia de guía, y soporte conductivo para el manejo de la cuarentena, esto genera frustración y confusión en la población.
La falta de insumos también se convierte en un factor de estrés, señaló la especialista, el que la población tenga acceso limitado a los recursos como pudiera ser un medicamento, esto debido a la cuarentena, al cierre, a la disminución de la movilidad, ya que estos factores pueden retrasarse la distribución de algunos medicamentos o algunos artículos de necesidad básica, y esto puede generar ansiedad en la población, y enojo.
Por último, dijo, y no menos importante, son los problemas financieros que la cuarentena ocasiona; “el interrumpir el quehacer profesional, el comercio, tiene serios impactos en la salud económica de la población, de todos nosotros, es un factor de riesgo, y por ende, de estrés y puede favorecer incluso al desarrollo de desórdenes psicológicos”, aseveró.
ica