Desde 2001, Suiza no ha tenido tiroteos masivos (el último ocurrió cuando un hombre irrumpió en el Parlamento matando a 14 personas, y luego se disparó a sí mismo), a diferencia de Estados Unidos, donde suceden con trágica frecuencia; y aún así, es uno de los países donde hay más armas de fuego por habitante.

Con 8.5 millones de ciudadanos, alrededor de 2 millones poseen armas, pero la tasa general de asesinatos es casi nula. Sin embargo, son amantes de las mismas, cada año, por ejemplo, se celebra un concurso de tiro para niños de 13 a 17 años llamado Knabenschiessen en Zúrich, una fiesta anual tradicional que se remonta al siglo XVII.

Tener una ciudadanía armada ayudó a mantener a los suizos neutrales durante más de 200 años.

Suiza no ha participado en ningún conflicto armado internacional desde 1815, pero algunos soldados suizos ayudan en misiones de mantenimiento de la paz en todo el mundo.

Otro dato interesante sobre este país está relacionado con las mascotas, ya que es muy complicado tener un perro, pues los dueños deben cumplir varias reglas de la legislación suiza de protección de animales, que establece las condiciones mínimas para la cría adecuada de animales y los cuidados esmerados de los mismos. Collares de picos y collares de adiestramiento que funcionan con estímulos eléctricos y aromas están prohibidos. Además de rapar sus orejas y rabos.

Por otro lado, Suiza cuenta con las mejores fábricas de chocolate en el mundo, además de ser uno de los países que más los consume. Sus habitantes comen al menos 18 kilos de chocolate por año y es aquí que grandes nombres, como Nestlé o Lindt crean para exportar; hay una chocolatería artesanal en cada esquina.

Actualmente, se percibe como uno de los países más desarrollados. Por su neutralidad, el país alberga inmigrantes de varios continentes, por lo que es considerado como uno de los países europeos con mayor diversidad cultural, y es uno de los países más ricos, sanos y felices del mundo.

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