Las autoridades chinas pidieron a los principales medios que no cubran el lanzamiento de “Mulan“, de Walt Disney Co, en una orden emitida luego de que estallara una controversia en el extranjero sobre los lazos del filme con la región de Xinjiang, dijeron a Reuters cuatro personas familiarizadas con el tema.

Programada para estrenarse el viernes en los cines locales, Disney tenía grandes esperanzas para Mulan en China, pero privar a la película de publicidad en los medios de comunicación estrictamente censurados del país sería otro golpe para la producción de 200 millones de dólares.

Protagonizada por conocidos actores chinos –Jet Li, Gong Li, Donnie Yen y Liu Yifei- y basada en una historia popular china, Mulan fue diseñada para atraer al público en China, el segundo mercado cinematográfico más grande del mundo.

Pero críticas variadas online y límites a la capacidad en los cines por las medidas de prevención del coronavirus probablemente ya afectarán su desempeño en la taquilla, incluso antes de que los principales medios de comunicación recibieran un aviso pidiéndoles que se abstengan de cubrir la película.

Tres fuentes dijeron a Reuters que los medios habían recibido el aviso, dos de los cuales contaron que fue enviado por la Administración del Ciberespacio de China. Una cuarta fuente de un importante periódico chino dijo que había recibido un mensaje de texto con una orden similar de un colega.

El aviso no dio ninguna razón, pero las fuentes dijeron que creían que se debía a la reacción en el extranjero por los vínculos de la película con Xinjiang.

Ni la Administración del Ciberespacio ni Disney respondieron inmediatamente a los pedidos de comentarios.

Filmada en parte en Xinjiang, los créditos de Mulan incluyen un agradecimiento a las autoridades de allí, lo que provocó llamados a boicotear la película en el extranjero.

La represión de China contra la etnia uigur y otros musulmanes en Xinjiang ha sido criticada por algunos gobiernos, incluido Estados Unidos, y grupos de derechos humanos.

El miércoles, el Global Times, un tabloide dirigido por el People’s Daily del Partido Comunista, criticó la reacción contra la película en un editorial de su edición en inglés, describiéndola como “otra manifestación de las ideologías extremas sobre China entre la opinión pública estadounidense”.

 

ica