Foto: Reuters La tercera noche consecutiva de protestas dejó un saldo de dos muertos y un herido por arma en la madrugada del miércoles en Kenosha  

Un joven de 17 años fue arrestado y acusado de homicidio en relación con un tiroteo en el que murieron dos personas y una tercera fue herida, durante protestas después de que un hombre negro fuera baleado a quemarropa por la policía en Kenosha, Wisconsin, informaron las autoridades.

Kenosha se ha visto sacudida por las protestas desde el domingo, cuando la policía disparó a Jacob Blake, un hombre negro de 29 años, por la espalda a corta distancia.

El incidente, capturado en video, ha reavivado las protestas por el racismo y el uso de la fuerza por parte de la policía en Estados Unidos.

La tercera noche consecutiva de protestas en la ciudad de 100 mil habitantes, entre Milwaukee y Chicago, dejó un saldo de dos muertos y un herido por arma en la madrugada del miércoles en Kenosha, Wisconsin, informó la policía.

El presidente Donald Trump, un republicano, dijo el miércoles que había hablado con el gobernador demócrata de Wisconsin, Tony Evers, quien aceptó el apoyo de agentes federales para restablecer el orden.

“¡HOY enviaré a la policía federal y la Guardia Nacional a Kenosha, WI, para restaurar la LEY y el ORDEN!”, escribió Trump en Twitter, sin dar más detalles.

El clima de violencia coincidió con la segunda noche de la Convención Nacional Republicana, en la que Trump ha hecho un tema de campaña la aplicación de la “ley y el orden” durante las protestas.

El sospechoso fue identificado como Kyle Rittenhouse, de 17 años, quien fue arrestado con una orden judicial de Illinois y acusado de homicidio intencional en primer grado en Kenosha, dijo un funcionario judicial del condado de Lake.

La policía de Antioch, Illinois, confirmó que un joven de 17 años había sido arrestado en relación con los disparos en Kenosha y que fue detenido bajo el sistema judicial del condado.

Las dos primeras noches de protestas en Kenosha estuvieron marcadas por estallidos de vandalismo y ataques incendiarios que destruyeron varios negocios. Y durante la tercera noche hubo muertos.

No está claro qué desencadenó los disparos, pero las calles de Kenosha estaban plagadas de una mezcla combustible de manifestantes y milicias armadas que protegían negocios locales.

“Parece ser que un miembro de una milicia decidió (…) aplicar la ley con sus propias manos y matar a manifestantes inocentes”, dijo el miércoles el vicegobernador de Wisconsin, Mandela Barnes, a la cadena de televisión MSNBC antes de que se informara del arresto.

Videos en las redes sociales mostraron escenas caóticas de gente corriendo y gritando en medio de una lluvia de balas, mientras varias personas se tendían en el suelo. El tiroteo siguió a una noche de escaramuzas que pareció calmarse después de que la policía disparó gases lacrimógenos y balas de goma contra los manifestantes que desafiaron el toque de queda.

 

aarl