Foto: Especial “En la entidad, quienes perdieron su ingreso fueron beneficiados con apoyos, alcanzando a 50 mil personas que se vieron afectadas al quedar sin trabajo”, indicó  

El Secretario de Desarrollo Económico, del Estado de México, Enrique Jacob Rocha, aseguró que hay indicios positivos que muestran que lo peor de la contingencia por Covid-19 ha pasado, sin embargo, reconoció que “es necesario generar esfuerzos conjuntos entre los aliados del entorno económico, para recuperar el terreno perdido y dinamizar el potencial del desarrollo empresarial”.

Lo anterior en el marco del Foro “Diálogos para la reactivación de la economía mexiquense”, con los que se busca encontrar estrategias para generar confianza para la inversión, apoyar al sector empresarial con mejora regulatoria, elevar el valor agregado de los productos y servicios de las MIPyMES, así como digitalizar, capacitar y generar inclusión financiera para el escalamiento.

Con apoyo de las Secretarías de Desarrollo Económico (Sedeco) y Finanzas, a través del Instituto de Administración Pública del Estado de México (IAPEM), el Gobierno del Estado de México busca propuestas de acción e impulsar la colaboración para reorientar el rumbo y retomar el ritmo de crecimiento económico de la entidad.

Ante ello, pretende diseñar y consensar estrategias concretas, prácticas y viables, de corto, mediano y largo plazo, que permitan recuperar y potenciar el dinamismo económico de la entidad, con visión de futuro.

El Subgobernador de Banxico, Jonathan Heath, reconoció que el Gobierno estatal es uno de los que han otorgado mayor apoyo para el impulso de la economía; mientras Abud Mirabent señaló la urgencia de centrar esfuerzos en el apoyo a las MIPyMES, pues el 91 por ciento de ellas ha sufrido una caída en sus ingresos, y el 69% enfrenta problemas de liquidez.

En su oportunidad, Rodrigo Jarque, Secretario de Finanzas, precisó que, desde el inicio de la contingencia, el Gobierno estatal estableció como una de sus prioridades, apoyar al sector productivo con diversos estímulos fiscales, como la reducción o el diferimiento del impuesto sobre nómina, y la generación de apoyos agrícolas y a microempresas.

“En la entidad, quienes perdieron su ingreso fueron beneficiados con apoyos, alcanzando a 50 mil personas que se vieron afectadas al quedar sin trabajo”, indicó.

 

 

AR