Foto: Cuartoscuro La investigación subraya que, pese a que siguió aumentando el número de contagios en Massachusetts durante el periodo de estudio, la tasa de transmisión disminuyó en el público general  

El director de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, Robert R. Redfield, comunicó en un comentario editorial publicado en la revista Journal of the American Medical Association, que el uso general y universal del cubrebocas durante la pandemia del Coronavirus, estará controlada en menos de ocho semanas.

 

“Si todo el mundo se pusiera cubrebocas en este instante, la pandemia podría estar bajo control entre cuatro u ocho semanas”, añadió Redfield.

 

De acuerdo con el texto presentado por JAMA Network, el uso universal del cubrebocas en los trabajadores de la salud y los pacientes ayudaron a reducir la transmisión de las infecciones graves por Coronavirus en el sistema de atención médica más grande de Massachusetts con más de 75 mil empleados.

 

El informe detalla que antes de la implementación del uso de tapabocas generalizado a fines de marzo de 2020, las nuevas infecciones entre los TS con contacto directo o indirecto con el paciente aumentaban exponencialmente, de 0% a 21.3% (un aumento promedio de 1.16% por día).

 

Sin embargo, después de que se estableció la política de uso obligatorio del cubrebocas, la proporción de trabajadores sanitarios sintomáticos redujo la positividad de las pruebas constantemente, del 14.7% al 11.5% (una disminución media del 0.49% por día). Aunque no es un ensayo clínico aleatorizado,

 

La investigación subraya que, pese a que siguió aumentando el número de contagios en Massachusetts durante el periodo de estudio (del 1 de marzo al 30 de abril), la tasa de transmisión disminuyó en el público general, respaldando el enmascaramiento universal “como parte de una estrategia de reducción de infecciones de múltiples niveles en entornos de atención médica”.

 

 

Agrega que cubrir la boca y la nariz con materiales filtrantes tiene dos propósitos: la protección personal contra la inhalación de patógenos y partículas dañinas, y un mayor control de la fuente para evitar exponerse a otros a microbios infecciosos que pueden ser expulsados ​​durante la respiración.

 

 

 

AR