Querétaro, palabra de origen purépecha y otomí que significa «lugar de peñas y juego de pelota», hay quien afirma que es una de las palabras más bellas del idioma español. Santiago de Querétaro es el nombre de la capital, hoy día alberga alrededor de 2 millones de los 2.75 mdh que presumiblemente hay repartidos en los 18 municipios del estado; fue fundada el el 25 de julio de 1531 por el indio Conín bautizado como Fernando de Tapia (que quizás fuera Cony aunque la información surge después de ser ampliamente conocido como Conín). En 1655 el pueblo recibe el título de ciudad de Santiago de Querétaro sin haber pasado jamás por el estatus de villa.

   Desde hace unos años es el 1er. destino turístico sin playa de México.

Cuenta con 6 Pueblos Mágicos, poblados con historia que muestran la identidad nacional en sus rincones, con una magia que emana de sus atractivos; visitarlos es una oportunidad para descubrir el encanto de México: San Sebastián Bernal, Tequisquiapan, Cadereyta, Jalpan, San Joaquín y Amealco; destaca que de éstos solamente Bernal no es cabecera municipal. «Camino Real de Tierra Adentro», conocido también como «El Camino de la Plata» o «El Camino de Santa Fe», fue declarado patrimonio cultural de la humanidad. Era el camino más largo de América en la época colonial y unió a la Ciudad de México con Nuevo México. Básicamente, era la ruta por la que se transportaba toda la mercancía durante el virreinato. Muchas de las ex haciendas del estado las encontramos a lo largo de dicho camino. Hay -o hubo- más de 80 ex haciendas, la mayoría herencia de la época colonial. Hoy en día, muchas son hoteles boutiques o sitios para boda. Hay varias zonas arqueológicas en el estado, Ranas, Toluquilla, Tacama y El Cerrito son las más conocidas. Hay vestigios de la existencia de Mamuts en los municipios de Corregidora y Amealco. La colorida «muñeca de trapo Otomí»  artesanal de Amealco bautizada como Lele (bebé) es un ícono cultural de Querétaro y de México en el mundo entero.

La Reserva de la Biósfera de la Sierra Gorda es la única donde aún se encuentran las 6 especies de felino salvaje que subsisten en México, el jaguar, el puma, el ocelote, el gato montés, el yaguarundi u onza y el tigrillo o margay, algunas consideradas en peligro de extinción. La Peña de Bernal, el tercer monolito más grande del mundo después del Peñón de Gibraltar y de Pan de Azúcar en Río de Janeiro; bajo ella hay yacimientos de oro y plata. Se encuentra en el pueblo de Bernal en el municipio de Ezequiel Montes, está aproximadamente a 45 minutos en auto de la ciudad de Santiago de Querétaro, allí encontramos carnitas y gorditas de maíz quebrado para comer como algo típico del lugar.

Hoy es el 2o. productor nacional de uvas.

La zona central también es conocida por la elaboración de queso, hay un corredor conformado varios por ranchos, exhaciendas, poblados y locales artesanales que se ha bautizado como “La ruta del queso y el vino” en los municipios de Tequisquiapan, Ezequiel Montes, Colón y El Marqués. Algunas cavas son tan grandes que bien valen un día entero para recorrer y degustar. Hacer un plan ida y vuelta a la Peña y a las Cavas (La Redonda y Freixenet) saliendo de mañana y regresando al atardecer es una muy interesante opción a considerar.

En Jalpan, Landa, Tancoyol, Tilaco y Concá en plena Sierra Gorda, existen 5 misiones franciscanas que fundó Fray Junípero Serra y cuyas fachadas que funden el estilo barroco tardío con innumerables toques indigenas, sobresalen y maravillan como parte también del Patrimonio Histórico de la Humanidad. Bucareli es un poblado enclavado entre Pinal de Amoles y San Joaquín. Al fondo de un imponente mirador llamado Cuatro Palos están las ruinas de lo que pretendió ser un convento fortaleza franciscano que entre sus edificaciones en pie conserva un museo–biblioteca con más de 450 volúmenes históricos escritos en latín.

Es de las ciudades más antiguas del país con 489 años a la fecha. El Centro Histórico fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1995.

El monumental Acueducto de Querétaro construido entre 1726 y 1739, es el símbolo de la ciudad y uno más de los Patrimonios de la Humanidad que tiene la zona, la leyenda dice que el Marqués de la Villa del Villar del Águila (Francisco de Urrutia y Arana) lo mandó construir para llevar el agua hasta el convento donde su amada estaba enclaustrada. Consta de 72 arcos, el de mayor altura con casi 30 m, que recorren 1.28 km y sumados a los más de 7 km a flor de tierra llevaban agua a 70 fuentes citadinas, para rematar en el convento de Santa Rosa de Viterbo. Querétaro fue la sede de la conspiración que dio pie a la lucha de independencia de México, la casa de la corregidora es hoy día el Palacio de Gobierno del Estado.

Otro edificio emblemático de la urbe es el Teatro de la República (antes Teatro Iturbide), lugar donde se firmó la Constitución de 1917 que rige hasta hoy a la nación. El Cerro de las Campanas, que ha sido absorbido por la mancha urbana de la ciudad, vio en 1867 el final de Maximiliano de Hasburgo y con él las intenciones francesas de imponer un emperador en México. El sitio es actualmente un agradable parque público. La Casa de la Marquesa es un espectacular y garigoleado edificio, hoy día convertido en uno de los hoteles boutique más exclusivos. Hay más de 1.400 monumentos históricos en la ciudad. Gastronomía típica de Querétaro: Sopa de elote, gorditas de migajas, nopales en penca, variaciones de barbacoa, carnitas, gorditas de maíz quebrado, enchiladas queretanas, guajolotes o pambazos, tacos dorados, tortas de basura, capirotada, jamoncillos, nieve de mantecado, entre otros muchísimos platillos típicos. Jurica y Juriquilla es para otra otra entrega.

Y hasta el próximo jueves, ¡abur!