La doctora en física y encargada del área de meteorología, Mar Gómez, difundió un hecho que es considerado como “ecocidio” o “desastre ecológico”, pues se vertieron más de 21 mil toneladas de diésel en la región del Ártico ruso, lo que provocó que los ríos Ambárnaya y Dalkikán, cuyas aguas alcanzan el océano Ártico se tornaran color “purpura” debido al gran grado de contaminación.
Indicó que los hechos ocurrieron el 29 de mayo, en una central eléctrica, ubicada a 10 kilómetros al oeste de Norilsk, una ciudad localizada al extremo norte de Siberia Occidental, cerca del Círculo Polar Ártico.
Detalló que las altas temperaturas de dicha región derritieron la capa de hielo permanente en el suelo, conocida como “permafrost”, lo que provocó fallos estructurales en uno de los pilares que sostenían un enorme depósito de diésel.
Luego de aquel derrame, fueron afectados 350 kilómetros cuadrados de la región, lo que contaminó el suelo, ríos y hasta un lago local, esto provocó que las aguas se tornarán en colores entre púrpura y rosado.
La experta indicó que según Greenpeace este desastre podría compararse con el incidente que se produjo en Alaska en 1989, cuando el petrolero Exxon Valdez encalló con un arrecife y se derramaron miles de toneladas de petróleo en el mar.
Explicó que la región de Norilsk, es conocida por ser una de las ciudades más contaminadas y sucias en todo el planeta, incluso, agregó que cae nieve negra debido al alto nivel de polución.
Además, de que no tiene árboles vivos en un radio de 48 kilómetros debido a la lluvia ácida, y hasta se estima que el 1% de las emisiones de dióxido de azufre de todo el planeta proviene de dicha ciudad. Su atmósfera recibe millones de toneladas de cobre, plomo, níquel o arsénico al año.
De igual manera, los habitantes tienen que vivir 45 días de noche permanente en el año, además, la temperatura media anual está por debajo de 0.
El pasado 29 de mayo tuvo lugar una grave catástrofe medioambiental con un vertido de más de 21.000 toneladas de vertido diésel en la región del Ártico ruso. (📸 Greenpeace Russia) pic.twitter.com/ES713iiZJX
— Mar Gómez (@MarGomezH) June 6, 2020