HOSPITAL ATIZAPAN

Desde hace dos meses, la vida del personal que labora en el Hospital General de Atizapán de Zaragoza “Dr. Salvador González Herrejón-Chrysler” dio un giro; se inició con la reconversión hospitalaria para atender a pacientes con Covid-19, seguida del equipo de protección adecuado y laborar sin riesgo alguno.

Como dijo el secretario de Salud del Estado de México, Gabriel O´Shea: “Nos encontramos en el pico del pico”, por lo tanto, el contagio continuará debido a que hay gente en la calle que no está acatando las medidas, afirmó Joel Sabas Rodríguez Sánchez, director general del Hospital General de Atizapán.

“Hacemos una insistencia en que continúen en su domicilio, quien así pudiera, para disminuir el número de pacientes. En este momento nosotros aún contamos con disponibilidad de camas. Sin embargo, atendemos con todo el equipo necesario, ya que atender a un paciente no solo consta de la cama, sino de internistas, urgenciólogos, asimismo con quien tiene la atención directa, que es el grupo de Enfermería”, reiteró.

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César Maldonado, tiene 31 años y seis años en el hospital; está en el área Covid desde que inicio la pandemia, él se aisló de su familia por temor a contagiarlos.

Es enfermero y estuvo a cargo de cuidar a Edwin, un joven de 21 años que luchó durante dos meses por su vida.

“Él estuvo muy grave, durante dos semanas fue intubado y estaba sedado; Edwin tenía mucho miedo y yo le decía que le echara ganas por su hija. Hoy me siento muy contento de que se vaya ya a su casa, su familia solo está buscando oxígeno para tenerlo en su hogar” platicó César, quién al concluir su jornada laboral se acercó a Edwin para despedirse y darle un abrazo.

 

 

Sin embargo, también ha visto casos no tan favorables. “Nosotros les pedimos material a la familia como agua, almohadas, etc.; y como ellos no pueden ver a sus pacientes nos entregan cartas. La esposa de Don Pedro, le mando una carta, y ya no pude leerla porque el señor empeoró y falleció”.

Nancy Mejía es enfermera y desde hace dos años labora en el Hospital General de Atizapán. Desde finales de febrero, ingreso al área destinada para pacientes contagiados.

En la fase 2 de la pandemia, se contagió, se aisló en su casa y con los cuidados de su madre, quien también es enfermera, salió adelante.

“Estamos demasiado cansados, nos ha pegado mucho la situación con pacientes, porque con los que están consientes hacemos una amistad y convivimos día a día, platicamos con ellos y mañana ya no están”.

Hace una semana, Nancy regresó al área Covid para continuar con su labor; con un overol tipo Tyvek, cubrebocas N95 y otro azul, así como goggles grises, ella ingresa a diario a las 7 de la mañana para atender a pacientes.

El 25 de abril se comenzó con la realización de videollamadas, “es una iniciativa que (para) darle una atención integral a los pacientes, pero además, una tranquilidad a los familiares”, afirma Rodríguez Sánchez, quien destaca que esta emergencia sanitaria “es el mayor reto al que me he enfrentado”.

 

 

ica