Foto: Cuartoscuro / archivo Consumidores reportan aumentos de hasta 50% en supermercados  

A pesar de que la inflación anual bajó en marzo a 3.25%, desde 3.70% reportada un mes antes, los consumidores resintieron un encarecimiento de hasta 50% en los productos básicos como frutas, verduras, huevo y carne, debido principalmente a la falta de abastecimiento y producción ante las medidas sanitarias por la pandemia del Covid-19 a nivel nacional.

El 7 de abril pasado, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó que durante marzo, los precios de los productos se redujeron, principalmente por una disminución en el costo de energéticos como la gasolina y otros combustibles.

En su comparación mensual, la inflación se redujo 0.05%, señaló el Inegi, lo que sorprendió a analistas y especialistas como Jonathan Heath, subgobernador del Banco de México (Banxico), quien en su cuenta de Twitter criticó el dato y atribuyó la baja en el indicador a un cambio en la forma de medición de inflación en marzo, respecto a febrero, pues se tuvo que optar por la vía tecnológica y no presencial para la toma de datos ante la pandemia.

Es así que mientras las cifras oficiales indican una reducción de precios, la realidad para millones de mexicanos es otra. “Siento que todo lo han subido en el supermercado en general, muy manchado… Voy al súper y es muy difícil no darse cuenta”, dijo Juan Pablo Simón, en un sondeo realizado por 24 HORAS.

Entre los comentarios recabados en el sondeo, las quejas hacia un aumento de hasta 50% en los precios se recargaron a verduras, como jitomate, frutas como mango y papaya, huevo, medallón de carne, alimento para perros y cerveza.

“Donde sentí un incremento fuerte es en el alimento para mis macotas. El bulto de 22 kilos me costaba 480 pesos y ahora lo compré por 600 pesos”, contó María José Ibañez.

En tanto que Tiara Yolanda Rodríguez Morán comentó que su vecina, dueña de una verdulería, se vio obligada a cerrar definitivamente por los incrementos en la central de abastos.

Otros casos expusieron que en algunos tianguis, la manzana pasó de 30 pesos en promedio hasta 60 pesos; los mangos, de 25 hasta 45 pesos; por una papaya mediana, se pagó hasta 70 pesos cuando antes costaba 35 en promedio; el jitomate pasó de 30-35 hasta 65-70 pesos.

Mientras que los productos de limpieza, como el Lysol líquido de cinco litros, que estaba entre 90 y 120 pesos, lo venden en 180 pesos en supermercados.

Para el caso de las cervezas, el paquete de seis botellas o latas, superan en promedio los 100 pesos, cuando hace unas semanas se cotizaba máximo en 70 pesos.

Para José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), el aumento en los precios de los productos se debe a la combinación de diversos factores.

“En la parte de bienes importados, el aumento es atribuible a la depreciación del peso y a la menor importación debido a que en algunos países se detuvo la producción de bienes consumidos en México. La menor producción interna también ocasiona problemas de producción y desabasto”, dijo en entrevista.

Agregó que también existe un aumento de consumo en algunos bienes, sobre todo en alimentos y enseres de uso diario en los hogares, lo que causa encarecimiento.

 

Cubrebocas se venden en línea hasta 700% más caros

Los costos de productos de prevención sanitaria, como los cubrebocas, reportan un incremento de hasta 700% en páginas de comercio electrónico, debido a un desabasto en supermercados y farmacias a nivel nacional.

Y es que se ofertan 400 mascarillas antivirales desechables, conocidos como cubrebocas, en 9,727 pesos, es decir, por unidad aproximadamente en 24.31 pesos, cifra que a finales de marzo estaba en sólo 3.00 pesos por unidad.

Lo mismo ocurre con el gel antibacterial, que antes de la pandemia por litro costaba alrededor de 40-60 pesos, mientras que en plena Fase 3, este producto supera los 100 pesos por litro, incluso en algunos casos hasta 150 pesos cuesta en páginas de comercio electrónico como Mercado Libre.

Especialistas atribuyen el incremento de precios en ambos productos preventivos, a un desabasto en tiendas y farmacias, lo que aumenta su demanda y su valor.

LEG