Derivado de la situación que ha creado el covid-19 en México, personas se han quedado sin ingresos, viéndose afectados en necesidades básicas como la alimentación; es por eso que diversas organizaciones e instituciones sociales han sumado esfuerzos para crear la campaña Familias sin hambre, que consiste en la elaboración de una canasta básica a partir de las donaciones realizadas por la población en general.

El costo de esta canasta es de $200 y está pensada para una familia de cuatro integrantes, conformada por dos adultos y dos niños o niñas, que rinde alrededor de una semana. “Lo que queríamos era familias sin hambre y nos dedicamos a crear una canasta básica, pero a un costo que pueda ser accesible, para que muchos mexicanos puedan sumarse y donar”, expresó para 24 HORAS, Fernando Milanés, presidente de la Confederación de las Uniones Sociales de Empresarios de México (Confederación USEM).

Milanés puntualizó que desde el inicio se buscó que la despensa contara con propiedades nutricionales, incluyendo una serie de alimentos como granos y proteínas, para eso buscaron asesoría con especialistas que pudieran optimizar la ingesta calórica de una familia con el dinero mencionado.

Además, los alimentos que conforman las despensas ayudan a los productores nacionales, pues están constituidas con productos provenientes de la Asociación Nacional De Tiendas De Autoservicio Y Departamentales (ANTAD) y de la Asociación Nacional de Abarroteros, que gracias a sus volúmenes tienen la posibilidad de ofrecer precios accesibles.

Para donar debes acceder a la página donadespensas.mx, por cada $200 de donativo se da una canasta. La plataforma acepta distintas formas de pago, como tarjetas de crédito o PayPal, que generan los comprobantes correspondientes y son deducibles de impuestos.

Las familias que deseen recibir un apoyo lo deben solicitar mediante la línea telefónica (01-800-CARTITAS), la llamada será canalizada por la empresa mexicana Qualfon, y después serán atendidos por un voluntario de Cáritas Mexicana que aplicará una serie de medidas para discernir a quién y cómo se va a apoyar.

La labor de distribución y logística también será llevada a cabo por Cáritas Mexicana, organización perteneciente a la Iglesia católica que cuenta con una gran presencia a lo largo del país y reconocimiento internacional. “Además de estar bien organizados, siguen protocolos internacionales y de transparencia, ellos son los que tenían la infraestructura y por eso ellos son el canal para distribuir esta ayuda”, indicó el presidente de la USEM.

Milanés recalcó la importancia de seguir donando, pues a pesar de las 8,124 despensas donadas y repartidas a lo largo del territorio nacional, las solicitudes han aumentado y no pueden cumplir con todas las peticiones.

La campaña seguirá disponible hasta que concluya la crisis sanitaria. Si tienes dudas o comentarios puedes enviar un correo a donantes@caritasmexicana.org.

 

PL