Foto: Especial La Procuraduría determinó el aseguramiento precautorio de los ejemplares, con base al artículo 119, fracción VII de la LGVS  

Debido a la agresión hacia inspectores federales que intentaban asegurar a un felino y un oso en las instalaciones de un circo en la ciudad de Oaxaca, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) presentó una denuncia de hechos ante la Fiscalía General de la República (FGR) por desobediencia de un mandato legítimo de autoridad.

 

El aseguramiento derivó de una denuncia popular presentada por el municipio de Oaxaca de Juárez, sobre un circo que poseía ejemplares de vida silvestre enjaulados y amarrados en condiciones que afectan su necesidad vital y sano desarrollo, aunado a que no son alimentados de manera adecuada; esto fue publicado en redes sociales.

 

Ante el reporte, la delegación de la Profepa en Oaxaca emitió una orden de inspección al “Circo del Oso Ruso”, por la posesión de un tigre de Bengala (Panthera tigris) macho, y un oso negro (Ursus americanus) senil macho de aproximadamente 30 años de edad.

 

Al observar el estado en el que se encuentran los animales, se determinó que, de acuerdo con su tamaño, ambos ocupaban un 50% del espacio en las jaulas, área muy reducida, limitando su movilidad; sin contar con un área de dormitorio, sin los espacios necesarios para ser atendidos de manera inmediata cuando sea necesario, detalló la Procuraduría.

 

“El felino se encontraba en malas condiciones de higiene y era evidente que no se realizaba una limpieza diaria en el sitio de resguardo, lo cual representa un factor de contaminación que como consecuencia podría afectar la salud del ejemplar y de las personas que lo atienden o estén cerca”, señaló la dependencia.

 

Lo descrito, representa actos que contravienen las disposiciones de trato digno y respetuoso de la fauna silvestre. Además, el inspeccionado omitió exhibir el Plan de manejo aprobado por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y no acreditó la legal procedencia de los ejemplares.

 

Así, la Procuraduría determinó el aseguramiento precautorio de los ejemplares, con base al artículo 119, fracción VII de la LGVS. Sin embargo, al señalar al inspeccionado la necesidad de trasladar a los ejemplares a un sitio adecuado, opuso resistencia y agredió con la participación de otras personas a los inspectores, obstaculizando al personal actuante de la Procuraduría realizar el manejo y traslado de los animales.

 

Ante los hechos acontecidos, y considerando que la Procuración de Justicia es una actividad esencial, que deber seguirse realizando, a pesar de la contingencia originada por Covid-19, la Profepa presentó dicha denuncia ante la Fiscalía por desobediencia de mandato legítimo de la autoridad, tipificado en el artículo 178 del Código Penal Federal.

 

 

AR